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Voto de andrepaolosnyder:
8
Drama Francia siglo XVIII. El Marqués de Sade pasa los diez últimos años de su vida en el asilo Charenton. Allí entabla amistad con el abate Coulmier, con el que comparte el afecto de Madeleine, la lavandera del asilo. Cuando Napoleón envía a un médico para que cure su presunta locura, el temperamento rebelde del marqués se agudiza todavía más. Obtuvo tres nominaciones a los Oscar, incluyendo el de mejor actor (Geoffrey Rush). (FILMAFFINITY)
25 de junio de 2009
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Inesperada y fluctuante.
La escritura, recluida en el asilo, marcada por la locura y la lucidez; escrita en sabanas usando vidrio y sangre de los dedos de aquel provocador, lujurioso, el marques de los sediciosos escritos eróticos, remedo de anticristo ensalzado por Napoleón através de la censura, termina entre letras y su propio estiércol.
Quills reivindica el arte por el arte en la cinematografía alejándola de una pretensión meramente representativa, evita seguir al pie de la letra la vida del marques a favor de contar una historia, obvia dicha pretensión y logra tener un buen argumento. Sin embargo al quitarse de encima la representación de la realidad y evitar poner como único protagonista al marques de Sade, logra mantener la importancia que merece; este un gran logro del filme, conservar el equilibrio entre el énfasis que se hace en el personaje de Rush y la simultaneidad de los acontecimientos que se desencadenan a su alrededor.Un gran logro es controlar lo sencillo, miradas sinuosas, comentarios punzantes, tomas adecuadas, para lograr crear sensaciones, líneas no dichas, pero expresadas; situaciones posibles, el juego con el ¿Qué sucederá?, inesperada y fluctuante.
Creíbles las actuaciones de Kate Winslet como Madeleine, quien encuentra el refugio, la necesidad de expresar aquel mal que llevamos dentro según San Agustín, en las lecturas del marques, esta es su cárcel, la tentación imposible, simultáneamente es piadosa y muy frágil, débil, realiza muy bien su papel; y Geoffrey Rush como el protagonista, logra llevar al éxtasis sus escenas, llenas de locura, tinta y tormento, la sensación de una mente desquebraja y carnal es lo que logra producir, una palabra: blasfemia. Joaquin Phoenix, un cura que se cuestiona constantemente, ante todo un joven con la enfermedad del idealismo, encuentra en Madeleine el pecado, el amor en forma de mujer, el control de sus miradas, candentes, logra expresar lo introspectivo, lo que mantiene enjaulado en la mente através de estas.
Buena locación, sin embargo el montaje suele ser poco creíble en algunos espacios, es relevante la caracterización de los personajes, teniendo en cuenta el vestuario y el maquillaje; en ocasiones la música logra pasar desapercibida al igual que el manejo de cámara, que utiliza encuadres poco arriesgados, no dejan algo positivo que decir.
Buena dirección, pero el espectador queda con la sensación de que falto algo para ser de cinco estrellas, tal ves falto ser un poco más innovadores, correr el riesgo, así la censura hubiera sido diferente; sin embargo, logra mantener aquel equilibrio necesario; una buena apuesta que de seguro consigue ser mirada otras veces.
andrepaolosnyder
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