Las primeras historietas que conocimos de Lucky Luke, entrados ya los años 60, nos pillaron dejando los tebeos y no nos interesaron gran cosa.
Tampoco nos han entusiasmado mucho las versiones cinematográficas de los cómics, ni Mortadelo ni Astérix nos han convencido. El pistolero "más rápido que su sombra", "El hombre que nunca ha matado" no es una excepción.
Las reticencias que teníamos antes de ver la versión de Huth se han confirmado al contemplarla. Una cosa es el lenguaje del dibujo y otra muy distinta el cinematográfico.
Así la cinta muestra una serie de aventuras del personaje, cuya personalidad se respeta escrupulosamente, pero sin una gran unidad argumental. El guion parece poco trabado, con golpes más o menos graciosos o simpáticos, con personajes que aparecen y desaparecen, pero sin gran coherencia. Viejos conocidos del far-west en papeles histriónicos y exagerados, en fin una caricatura del Oeste y de sus personajes ... como corresponde por otra parte al lenguaje del cómic.
Entre las cosas positivas hay que destacar la elección de los paisajes que se presentan siempre en planos muy estáticos al modo de las viñetas del tebeo. El aspecto impecable de Lucky, su "Look" y el del resto de personajes. Lo mismo que la ambientación (estupenda Las Vegas), vestuario, música, fotografía ... Pero le falta alma a la cinta.
La recomendamos a los seguidores del personaje y a quienes gusten del cómic versionado en el cine. Absténganse los aficionados al western, como es nuestro caso.
"Soy un pobre vaquero solitario ..."