Magnífica película en la que se nos presenta a tres personajes muy diferentes cuyas vidas van a confluir en dos tramas que afectarán fundamentalmente a dos de ellos en el devenir de sus vidas. Vuelve Eastwood a preguntarse una vez más por el destino, el sino, o para los pragmáticos la casualidad, que cincela sin compasión las vidas de cada cual, con mayor o menor fortuna.

No sé explicar qué me atrajo más de esta historia, si el desarrollo y la resolución del suspense o la evolución psicológica de los personajes. Extraordinaria habilidad la de enlazar las dos cuestiones hasta el punto de no saber encuadrar la película puramente de drama o de thriller. Las dos caminan de la mano poniendo al espectador en máxima tensión hasta el final, que nos reserva algunos golpes de efecto sencillamente magistrales.

Ciento y pico minutos de cine altamente satisfactorios e imprescindibles.