Esta película supone el regreso de Timothy Dalton a la piel de James Bond, tras el film: Alta tensión.
La marcha de Moore no causó buena sensación a los amantes de James Bond, debido en parte a la gran cantidad de películas que éste protagonizó.
Por ello, la recaudación del primer film de la "era Dalton", no recaudó lo que los productores habían esperado. Aún así, confiaron en él para la realización de la siguiente película, que resultó ser esta.
Tras acabar de adaptar todos los libros de Ian Fleming, los productores confiaron a los habituales guionistas de la serie: Michael G. Wilson y Robert Laudaum el guión totalmente inventado de James Bond. (Por ello, ésta resultó la primera película, cuya trama era totalmente inventada, sin tener nada que ver realmente con Fleming. El mismo procedimiento seguiría en las posteriores pelis de Brosnan).
Estos dos excelentes guinistas lograron crear un film insólito. El habitual género de los largometrajes de Bond es la acción, sin embargo, consiguieron hacer un trhiller de acción muy bien hecho y planteado.
Destacar la venganza de Bond, ya que normalmente veíamos un agente británico que considerábamos perfecto, que prefería defender los intereses de su país a los suyos propios.Sin embargo, en esta ocasión, será la viceversa.
Será despedido por su jefe y no se parará ante nada ni ante nadie, hasta conseguir vengar la muerte de su amigo de la CIA Félix.
Un film original, con limitadas escenas de acción ( a excepción del prólogo y final), que por lo demás, logra seguir con la temática Bond: chicas guapas, aparatos maravillosos, grandes villanos...
Altamente recomendable y original.

Post Data: Una encuesta realizada en Gran Bretaña sobre las películas de Bond, se saldó con una clara mayoría, cuya favorita era esta.