El subtítulo que los directivos pusieron para acompañar al famoso título resume perfectamente una de las mejores tramas que la compañía californiana ha hecho en la última mitad del siglo.
Como todo el mundo dice el film es una obra maestra, en el cual se aprecia el ritmo de Scott, las actuaciones, la música de Jerry Goldsmith, la atmósfera que poco a poco aparece en la nave y un intenso suspense, que sin duda la hacen la mejor película de ciencia ficción, sólo comparada con "Star Wars" o "2001".
Sin embargo, el tema de por sí a mi gusto, no me atrae mucho y aunque todo lo que ocurre en la película está muy bien rodado y demás, ésta no es la clase de película que me atrae y por ello, no la considero una obra maestra.
Lástima.