Una película bastante buena, que narra la historia de un narcotraficante cuya vida parece de sueño hecho realidad, sin embargo se demuestra que no todo es color rosa.

Es muy peculiar ver el papel de Johny Deep en esta cinta, pues a diferencia de lo que nos tiene acostumbrados en sus otras actuaciones donde se le ve interpretar a personajes un tanto cómicos; aquí se ve un lado poco conocido y más serio del actor que al principio cuesta aceptar pero conforme avanza la historia te das cuenta de lo talentoso y carismático que es Deep.

En cuestión de producción cabe destacar que el contexto en cada escena de la historia es bien logrado pues al
ser totalmente realista se requiere reflejar con precisión el entorno social de la época en que se desarrolla, cosa que no falló en lo mínimo, considerando la antigüedad y los recursos disponibles para la grabación de la película.

Ésta es una historia que si bien nos recuerda a los clásicos y antiguos rodajes sobre gangsters del siglo pasado, nos da un ángulo diferente de estos personajes. A través de un narración autobiográfica, conocemos la historia de George Jung, un gran narcotraficante de aquella época que se ve atormentado por vivir el sueño americano y al final no todo le resulta tan bien.

Considero que lo más importante de esta película más allá de contar la vida de otro criminal famoso, es el mensaje que da; un mensaje que revela la cruda realidad de lo que la avaricia y la inmadurez pueden hacer en una persona y que lamentablemente le llevan a hacer cosas de las cuales puede arrepentirse.