Parece ser que el gusto por los niños con mala “rebaba” ha vuelto, véanse si no “Thelma”, “The Prodigy” o “Cuidado con los extraños”.
David Yarovesky es un director novel que en 2015 dirigió “The Hive” una cinta de terror que le da otra vuelta de tuerca al género zombie.
Ahora en 2019 vuelve a demostrar su profundo interés por el terror y con “El Hijo” nos da una visión muy particular del antihéroe.
El matrimonio formado por Tori (Elizabeth Banks) y Kyle (David Denman) viven en una granja aislados del mundanal ruido urbano. Llevan un tiempo buscando tener un hijo y una noche dentro de una nave espacial que ha aterrizado en la Tierra encuentran en su interior un bebé.
La pareja lo adopta como si fuera suyo y poco a poco según Brandon (Jackson A. Dunn) va creciendo comprobarán que va dando muestras de un comportamiento muy extraño y lo que podría ser normal en una época adolescente pronto pasará a ser un peligro constante para las personas que le rodean.
Brandon posee unos poderes especiales más propios de un súper héroe pero a diferencia de estos los utiliza de una forma malsana y diabólica.
La cinta se mueve entre títulos como “El Buen Hijo” o la más actual “The Prodigy” con la que cuenta muchas similitudes como es el amor incondicional de una madre por un hijo y que prácticamente parecen perdonarle cualquier cosa. Hay un fuerte componente dramático por que los padres tendrán que lidiar con los problemas que el niño va creando y especialmente la madre que ha creado un fuerte vínculo afectivo con él. Por esta circunstancia habrá momentos que nos recordarán a “Thelma” pero sin el lado poético de ésta.
Yarovesky que ha contado con la producción de James Gunn (Guardianes de la Galaxia) ha querido dar su particular versión de “Superman” pero en este caso en vez de ser un aliado y defensor de la humanidad será un verdadero hijo de …
La película ofrece unas escenas aterradoras, sangrientas y especialmente unos asesinatos brutales que no dejarán indiferente a nadie. Otra cosa a destacar será la perturbadora actuación de Jackson A. Dunn que dejará helado a más de uno y si te descuidas te quiebra una mano.