La mejor y más emotiva película del género épico y hasta del resto de géneros. El icono del cine de los 90. Wallace, uno de los personajes-leyenda de la gran pantalla.

Una leyenda histórica que engancha. Unos personajes muy definidos con los cuales te identificas. Una narración que emociona como pocas y un final impecable e inolvidable que transmite y apasiona como pocos. BSO asombrosa con una música celta que te cala.

El perfecto ritmo narrativo. La belleza sin excesiva "ñoñería" de una historia de amor inicial y hermosa combina con un empuje brutal y belicista que engancha en todo momento. Alrededor de tres horas de no parpadeo y de una emoción de las que no puedes evitar comentar después.


Personajes para la historia:

-Mel Gibson "Wallace": Emotivo en "el papel de su carrera". Supera todos los registros anteriores y ejecuta inmejorablemente un papel complicado de llevar a cabo. Espectacular
-Sophie Marceau "La princesa de Gales": No se veía nada tan bonito desde hacía mucho tiempo en la gran pantalla. Sus ojos brillantes de enamorada emocionan y atrapan.
-David O'Hara "Stephen, Loco Irlandés": Magnífico de irlandés trastornado pero leal hasta la muerte. De lo mejorcito de la cinta.
-Catherine McCormack "Murron": La sorpresa y revelación interpretativa de esta actriz debutante que clava un papel secundario.
-Patrick McGoohan "Eduardo de Inglaterra": Todos los elogios son pocos. Posiblemente el rey más despiadado de todos los films históricos. No se pierdan su agonizante final. Todo un ejercicio interpretativo.
-Brendan Gleeson "Hamish": El inseparable de Wallace. Con más "cojones" que nadie. Notable.
-Angus MacFayden "Robert Bruce": Acobardado e influenciado por su padre. Demuestra valor y miedo en sus ojos a lo largo del film.
- James Cosmo "Padre de Hamish": Sobervio el veterano actor de principio a fin.