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Voto de Ithildin:
77.674
Romance. Drama
La apacible pero anodina vida de Francesca Johnson (Meryl Streep), un ama de casa que vive en una granja con su familia, se ve alterada con la llegada de Robert Kincaid (Clint Eastwood), un veterano fotógrafo de la revista National Geographic, que visita el condado de Madison (Iowa) para fotografiar sus viejos puentes. Cuando Francesca invita a Robert a cenar, un amor verdadero y una pasión desconocida nacerá entre ellos. (FILMAFFINITY)
25 de junio de 2020
5 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Resumen de la película:
- Clint: ¿Le apetece un cigarrillo?
- Meryl: Claro.
[Otra escena tres minutos después]
- Clint: ¿Le apetece un refresco? Tengo alguno en la parte trasera de mi camioneta.
- Meryl: Claro.
[Otra escena diez minutos después, esta vez más pulida]
- Meryl: ¿Le apetece un café o un coñac?
- Clint: ¿Por qué no las dos?
[Escena eterna en la que se sientan a hablar en la mesa de la cocina]
Polvo.
Fin.
Parece mentira que un duro del cine como Clint Eastwood dirija y protagonice semejante moñada de película, un film tan empalagoso que sube el nivel de azúcar en sangre sólo de ver sus créditos iniciales.
La historia va de como una paleta sureña insatisfecha sexual y más caliente que un adolescente en celo engaña a su marido con el primero que pasa, eso sí, le metemos un par de primeros planos, unos sugerentes intercambios de mirada y una música sensiblera y, ¡oh!, todo se ha vuelto muy romántico de repente.
- Clint: ¿Le apetece un cigarrillo?
- Meryl: Claro.
[Otra escena tres minutos después]
- Clint: ¿Le apetece un refresco? Tengo alguno en la parte trasera de mi camioneta.
- Meryl: Claro.
[Otra escena diez minutos después, esta vez más pulida]
- Meryl: ¿Le apetece un café o un coñac?
- Clint: ¿Por qué no las dos?
[Escena eterna en la que se sientan a hablar en la mesa de la cocina]
Polvo.
Fin.
Parece mentira que un duro del cine como Clint Eastwood dirija y protagonice semejante moñada de película, un film tan empalagoso que sube el nivel de azúcar en sangre sólo de ver sus créditos iniciales.
La historia va de como una paleta sureña insatisfecha sexual y más caliente que un adolescente en celo engaña a su marido con el primero que pasa, eso sí, le metemos un par de primeros planos, unos sugerentes intercambios de mirada y una música sensiblera y, ¡oh!, todo se ha vuelto muy romántico de repente.
