El problema de esta película no es otro más que el guion. La historia es tópica, de desarrollo predecible y, en cierto modo, está un poco suavizada. En otro director cualquiera se tacharía de entretenida y a otra cosa, pero es que de Verhoeven se espera más: un ritmo imparable, rápido, que agarra el corazón y no lo suelta; escenas violentas, sexo y sangre sin cortarse lo más mínimo (estas señas de identidad están en la película, pero de forma tímida); y por último una demoledora crítica social, ausente en el film, aunque se entreven algunas trazas de crítica al poder y la corrupción del alma que éste trae consigo... pero de nuevo, tratado con timidez. ¨El Hombre sin sombra¨ parece dirigida por un Verhoeven contenido.

Esto no quita que tenga cosas buenas: la capacidad para lograr escenas que se graban en la retina está intacta. La película está bien dirigida. Y hay dos grandes elementos a destacar: Kevin Bacon, que le sienta muy bien el papel y le pone un aire amenazante; y los efectos especiales, muy logrados.

Pero... agg... ¡el guion!. La historia está desaprovechada, la última media hora se compone de tópicos uno tras otro hasta desembocar en un final de lo más convencional. Y ya no digamos los personajes, bastante planos. Todo ello se carga la película por muy bien que esté lo demás.

Entretiene, pero también decepciona.