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España España · Córdoba
Voto de echulin:
4
Drama París, 1968. Isabelle (Eva Green) y su hermano Theo (Louis Garrel), solos en la ciudad mientras sus padres están de viaje, invitan a su apartamento a Matthew (Michael Pitt), un joven estudiante americano, al que han conocido en un cine. Una vez en casa, establecen unas reglas para conocerse mutuamente, explorando emociones y erotismo a través de una serie de juegos extremadamente arriesgados. (FILMAFFINITY)
16 de noviembre de 2013
15 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
Todo director famoso y con éxitos notables como 'El último tango en París', 'El último emperador' o 'Belleza robada' tiene una legión de mitómanos a los que les parece una genialidad cada defecación que excreta.

Aquí nos presenta a tres adolescentes idealistas en posesión de la verdad absoluta. Dos de ellos son hermanos con jueguecitos sexuales entre ellos. Esa es la parte morbosa. Luego llega un americano que involucran en sus juegos y con él llega la discordia.

De trasfondo, el mayo del 68, por situarla en alguna parte en el tiempo, nostálgico para aquellos académicos hollywoodienses que pasasen parte de sus años de universitarios en París (los ricos de la época). De todas formas, ese trasfondo es totalmente prescindible en la historia. Sólo está ahí para soltar algunas frases grandilocuentes, pedantes e inconexas sobre revolución, el comunismo, el fascismo y lucha de clases. Un sinsentido.

Otro tema cansino es poner a los protagonistas como cinéfilos frikis que se saben de memoria cada escena de los clásicos de los años 30. Películas que ya sólo recuerdan esos mismos académicos que he nombrado (yo sólo he reconocido 'Freaks' de Tod Browning). Cansa hasta el hastío.

Los actores son tan malos que no sirven ni para freír un huevo. Literalmente.
La única parte positiva de esta película es Eva Green, que ilumina cada escena en cuanto aparece, ya sea desnuda o vestida con transparencias. Tiene una cara bonita y un cuerpo delgado, pero con las caderas marcadas y pechos generosos. Bertolucci no escatima en enseñarlo, lo cual es de agradecer. Ella es todo el erotismo y la belleza que pueda tener esta película. Todo lo demás es paja. Bertolucci no hace nada para conseguir un ambiente más seductor que ayude en este sentido. Es Eva. Sólo Eva.
echulin
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