Nos encontramos con una película a caballo entre la comedia y el género de mafiosos (marcando distancia con el género negro), que no convence en ninguno de los dos aspectos.

Tenemos una banda de mafiosos compuesta por un capo y otras 3 personas, y encima el capo quiere acabar con las bandas rivales. Bastante ridículo. Hablan de lo bien que les va, pero en la caja fuerte del capo sólo tienen $100.000, es decir, $25.000 por cabeza (unos 18.000 euros). A mí sinceramente no me parece que les vaya tan bien. Cualquier mileurista ya ha ahorrado eso con veintipocos años.

Luego la historia se vuelve truculenta, contando la vida de varios personajes a base de innecesarios flashbacks. Un flashback viene bien para contar algo importante del pasado. Contar la historia a base de flashbacks viene bien cuando no se puede contar linealmente, como ocurre con 'Reservoir dogs', pero lo que no tiene sentido es abusar de ellos en una película que podía haberse contado de pe a pa del tirón. Pero claro, entonces esta historia tan endeblita se hubiese quedado en nada.

Las escenas silenciadas desde el punto de vista del sordomudo se hacen pesadas. No necesito silencio absoluto para entender que un sordomudo no oye, gracias. Su forma de gestionar el dinero tampoco me parece nada creíble.

Es una película totalmente prescindible, que se deja ver pero en muy pocos momentos engancha.