Tras ver esta película, dos convicciones mías se han fortalecido:
- Los diez negritos de Agatha Christie ni se han ido, ni se irán.
- Las teorías de Aristóteles sobre el arte de la narrativa son de plena actualidad, y lo importante no es lo que se cuenta, sino cómo se cuenta y que tenga coherencia interna.

Es por ello por lo que Identidad es una buena película, ya que a pesar de su argumento abracadabrante tanto el guionista como James Mangold son capaces de que todo encaje lo suficiente para mantener la ficción. Respecto a este último, su trabajo es sobresaliente a la hora de planificar visualmente la película y darle una atmósfera entre amenazante y onírica; son muy de agradecer también como en ciertos planos va dejando "miguitas de pan" de forma inteligente. Como he dicho, es llevar el esquema "número n de individuos en entorno cerrado con luctuosas consecuencias" un poco más allá con elementos que no son nuevos pero que hacen que desde el minuto uno el espectador este bien amarradico de sus partes y la función pase en un sinvivir; es decir, lo que se supone que tiene que ser el cine. Y además el reparto está muy bien, copón.

PD- nota curiosa para los ochenteros: uno de los protagonistas es el hijo de Gary Busey. ¡Gary Busey, tíos!. Se parecen mogollon y suelta una de esas risas locunas del padre que tanto nos gustaban...