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España España · MADRID
Voto de Spark:
7
Thriller Basada en la vida real de Barry Seal, un piloto de la TWA reclutado por la CIA que se convirtió en un importante narcotraficante que movía droga para el cartel de Medellín de Jorge Ochoa y Pablo Escobar entre los Estados Unidos y Centroamérica, viéndose involucrado en importantes sucesos de los años 80 como el escándalo Irán-Contra. (FILMAFFINITY)

26 de septiembre de 2017
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Una placentera e intensa mezcla de intriga y comedia es lo que nos ofrece el director Doug Liman (El caso Bourne" (2002), "Señor y Señora Smith" (2005), "Al filo del mañana" (2014)) en "Barry Seal - El traficante". Liman nos relata una historia basada en hechos reales de los años 70-80, en la que un descarado piloto (Tom Cruise) es contratado por la CIA para hacer fotos desde aire de las fuerzas comunistas de latinoamérica; y así Barry Seal sobrevuela Honduras, El Salvador, Panamá y... Colombia... Colombia... sobrevuela el cártel de Medellín, sobrevuela a Pablo Escobar y demás... algo muy tentador para un Seal que rápidamente aprovecha sus viajes clandestinos para algo más que hacer fotos. Y así (y como dice el título de la película) la droga y el dinero acaban siendo pasajeros VIP de sus vuelos.

El largo de Liman sigue la pauta del cine de opulentos estafadores que se toman su estilo de vida con humor, desvergüenza, insolencia y osadía. Y, si bien hay que salvar un poco (aunque no mucho) las distancias, "Barry Seal" emula (y en muchos casos logra el mismo o mejor resultado) a grandes cintas del género de estafadores a lo grande como "El lobo de Wall Street" (2013), "Gold - La gran estafa" (2016), "Atrápame si puedes" (2002), "El talento de Mr. Ripley" (1999) o "La gran estafa americana" (2013). Y, si bien las diferencias entre "Barry Seal" y algunas de las cintas mencionadas (casi todas ellas también basadas en hechos reales y todas ellas con personajes que utilizan las habilidades en su oficio (en "El lobo de Wall Street" su protagonista utiliza su talento como broker, en "Gold" su protagonista utiliza su conocimiento en los tests para las prospecciones de oro, en "Atrápame si puedes" y "El talento de Mr. Ripley" sus protagonistas utilizan sus habilidades como falsificadores, y en "Barry Seal" su protagonista aprovecha sus habilidades como piloto) para lucrarse descarada e ilegalmente) son pocas, sus defectos son también tan pocos como en el resto de los films mencionados.

Pues en "Barry Seal" la trama de este lenguaraz listillo amante de la adrenalina y el riesgo, y con suficiente ingenio para el engaño... se nos narra con la misma viveza, cohesión, elocuencia y dinamismo que los mejores films de este género. Difícilmente "Barry Seal" va a aburrir al espectador (quizás en la presentación de personajes y su primer tercio, donde la fluidez del relato queda un poco más aletargada que en el resto del metraje... pero aun así también resulta un tercio en su conjunto interesante) pues la temática que nos propone es del todo jugosa y su desarrollo se nos plantea con una catarata de situaciones y momentos completamente singulares, curiosos y llamativos, cargados de una ironía y una extravagancia de lo más sagaces e intuitivas (¿a que todo esto recuerda a "El lobo de Wall Street"?, aunque aquella en sus momentos de humor presentó aun más talento e ingenio que este "Barry Seal"). Así pues la trama se desarrolla con agudeza, astucia y energía en el libreto (un libreto que pudo ahondar mucho más en dramas personales e intimistas de sus personajes... pero que es incapaz de hacerlo, pues abarca tantos acontecimientos de tráfico de drogas, armas, personas, blanqueo de dinero y "amistades peligrosas" que hubiera sido imposible dar más profundidad y matices al relato sin alargarlo 3 horas más al menos).

Y la puesta en escena no le va a la zaga. Liman decide no dejar amodorrado al espectador en ningún momento y desarrolla la historia con una edición diligente y (al contrario que optar por lo estático y el plano/contraplano más habitual) un variado abanico de planos subjetivos, planos contrapicados, planos detalle y focos alternos que dan un toque al film muy especial, y un tono tan desvergonzado, temerario e intrépido como lo es su protagonista. Se nota el oficio del director de "El caso Bourne" en films de este tipo donde los personajes no paran quietos, y donde la acción atrevida e irreflexiva es crucial para el desarrollo argumental. La cinta también presume de un buen uso de las elipsis temporales en las que Seal nos narra con descaro ciertas situaciones.

Tom Cruise por su parte sigue en su línea, sin resultar el sumun del carisma interpretativo (no es Clint Eastwood, Tom Hanks o Daniel Day-Lewis. Y por lo que se ve nunca lo será) encaja en su rol con la misma solvencia, oficio y naturalidad que es habitual en él (y aquí realiza uno de sus trabajos más elaborados... aunque en mi opinión no llega al nivel que logró en "Jerry Maguire", "Entrevista con el vampiro" y "Nacido el 4 de Julio"), Cruise se mimetiza con Barry Seal y encaja como un guante en este personaje caradura y sociable ("dones" imprescindibles en todo buen estafador). Jayma Mays se nos presenta como una intérprete prometedora, y el resto de actores aportan realismo a sus personajes... aunque no tienen muchos minutos con los que trabajar.

El diseño de producción es también notable, cuida todo detalle, desde el sudor de Seal en sus momentos de puro riesgo aéreo (las escenas de vuelos son lo mejor del film) o mafioso hasta los tortuosos caminos de la selva Colombiana, la fotografía se tiñe de colores vivos y una iluminación considerable pero pertinente, y la banda sonora no tiene temas memorables pero son tan eficaces (los temas instrumentales son fogosos y enérgicos con un gran uso de las guitarras eléctricas y las baterías) que son del todo agradecidos en sus escenas.

En definitiva: una cinta por encima de la media con unos elementos distinguidos y engarzados con pericia, otra estafa norteamericana a gran escala que nos va a interesar y a divertir a partes iguales llevada a escena con gusto y estilo. Recomendable de visionar al menos una vez (va perdiendo en sus visionados, pero el primero resultará inolvidable).

Lo mejor: Me quedo con todas las elipsis, los osados pero sarcásticos momentos en los que Seal trata con la familia Escobar y sus empleados y las escenas dentro de los aviones en pleno vuelo, y...
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
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