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Voto de Spark:
7
6,5
13.469
Serie de TV. Animación. Infantil. Comedia. Aventuras
Serie de TV (2007-2015). 222 episodios. Phineas y Ferb son dos medio hermanos que viven en compañía de su hermana Candace y sus padres Lynda y Lawrence en el pequeño pueblo de Danville. Ambos hermanos están insatisfechos con simplemente estar fuera de la escuela el verano entero, sin hacer nada más, por lo que se dedican a buscar una idea novedosa y excitante para disfrutar más las vacaciones. Su hermana Candace sabe de sus inusuales ... [+]
15 de agosto de 2011
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Phineas y Ferb" son los únicos dibujos animados de los que puede estar orgullosa la cadena de Mickey Mouse en este nuevo siglo, ¡LOS ÚNICOS!. Es la excepción de una triste regla que ha ido dejando mediocridad tras mediocridad. Y el producto no solo iguala a los dibujos animados de los noventa de la cadena... ¡sino que incluso los supera!
La serie se desarolla en el verano de un par de niños hermanos que aprovechan los días haciendo inventos y experimentos imposibles (transformado juguetes en cohetes espaciales, creando monstruos gigantes de gelatina...), mientras que la hermana mayor trata de pillarles en sus travesuras para chivarse a su madre. Por otro lado, la mascota de la familia (un pequeño ornitorrinco) tiene una identidad secreta: en realidad es un espía que en cada capítulo salva al mundo de los malvados planes de un científico loco de nombre impronunciable.
La serie solo gasta 15 minutos y sus argumentos son repetitvos y exagerada e intencionadamente chorras (ahí reside su gran encanto). Pero cada episodio tiene un ritmo eufórico y vibrante, un diseño sencilllo pero enormemente positivo y expresivo lleno de colores vivos, unos personajes encantadores, empáticos y nervudos (Candance, esa adolescente enamorada tontamente del guaperas del barrio y sobrepasada por sus hermanos es desternillante; el científico loco deslenguado que se ríe de sí mismo es comprensiblemente desgraciado; el risueño e hiperactivo Phineas es adorable; etc), un doblaje estupendo, y sobre todo tiene unos guiones perspicaces y agudos (que engarzan todo con inventiva) con momentos de excesiva autoparodia desvergonzada (como nunca antes había visto en una serie infantil animada) y humor disparatado que hará "clic" continuamente en el adulto de risa fácil que no se avergüenza de rememorar su infancia con sus momentos de absurdez y despreocupación... (sigue en spoilers)
La serie se desarolla en el verano de un par de niños hermanos que aprovechan los días haciendo inventos y experimentos imposibles (transformado juguetes en cohetes espaciales, creando monstruos gigantes de gelatina...), mientras que la hermana mayor trata de pillarles en sus travesuras para chivarse a su madre. Por otro lado, la mascota de la familia (un pequeño ornitorrinco) tiene una identidad secreta: en realidad es un espía que en cada capítulo salva al mundo de los malvados planes de un científico loco de nombre impronunciable.
La serie solo gasta 15 minutos y sus argumentos son repetitvos y exagerada e intencionadamente chorras (ahí reside su gran encanto). Pero cada episodio tiene un ritmo eufórico y vibrante, un diseño sencilllo pero enormemente positivo y expresivo lleno de colores vivos, unos personajes encantadores, empáticos y nervudos (Candance, esa adolescente enamorada tontamente del guaperas del barrio y sobrepasada por sus hermanos es desternillante; el científico loco deslenguado que se ríe de sí mismo es comprensiblemente desgraciado; el risueño e hiperactivo Phineas es adorable; etc), un doblaje estupendo, y sobre todo tiene unos guiones perspicaces y agudos (que engarzan todo con inventiva) con momentos de excesiva autoparodia desvergonzada (como nunca antes había visto en una serie infantil animada) y humor disparatado que hará "clic" continuamente en el adulto de risa fácil que no se avergüenza de rememorar su infancia con sus momentos de absurdez y despreocupación... (sigue en spoilers)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
... Yo empecé a ver "Phineas y Ferb" con mis sobrinos... y poco a poco el producto me acabó conquistando. Todo comenzó cuando una niña de la serie tenía rizos por la humedad... y así, sin venir a cuento, la serie introdujo un pegadizo y brevísimo número musical de la chavala disfrutando y bailando por el hecho de tener rizos dentro de una "disco" inexistente. El momento me resultó tan deliciosamente absurdo que no pude parar de reír. Y así, empecé a tantear sus capítulos en los que de repente me salía sin querer una desternillante carcajada... y al minuto siguiente otra, y luego otra. Ahora confieso que veo esta serie sola y no me avergüenzo porque, al igual que Bob Esponja, esta serie infantil no es una más... sino "algo" más. No es tan excelente como Bob Esponja (por el hecho de que esa no tiene ni un solo capítulo de desperdicio, mientras que "Phineas y Ferb" sí tiene algún que otro capítulo negro)... pero por ahí van los tiros a la hora de que pueda gustar a un adulto: esconde un humor y una livianidad muy especial. "Phineas y Ferb" rompe sus propias normas en sus gracietas con premeditación y alevosía, ofrece una absurdez adorable y brillante, un buen rollo único y una irreverencia total. Le da mil vueltas a cualquier sitcom adulta del momento.
El producto mantiene con una sonrisa tonta y deja alguna carcajada desternillante. Genial para relajarse amablemente sin pensar, merece la pena si se valora el humor en detrimento del infantilismo. Personalmente nunca me han parecido una perdida de tiempo sino de los mejores momentos de la semana. Recomendable para gente de 1 a 100 años.
Lo peor: Que me parece que copia un poco a una serie de Cartoon Network de los 90: El laboratorio de Dexter (aunque por mucho que me pese pisotear mi infancia, reconozco que "Phineas y Ferb" es mucho mucho mejor que aquella serie del niño pelirrojo con un laboratorio infinito en el sótano de su casa. El humor de esta maravilla de Disney Channel es superior y sus personajes tienen más empaque. "Phineas y Ferb" no parece esconder de donde toma "inspiración"... pero lo mismo mismo da si el regreso a la fórmula es tan bueno como éste). Que hay algún capítulo olvidable.
Lo mejor: Candace. Algún número musical sin venir a cuento que puede hacer carcajear al espectador. El como a veces su desarrollo disparatado te mantiene en un estado de feliz y descacharrante borrachera y alucinación sana.
El producto mantiene con una sonrisa tonta y deja alguna carcajada desternillante. Genial para relajarse amablemente sin pensar, merece la pena si se valora el humor en detrimento del infantilismo. Personalmente nunca me han parecido una perdida de tiempo sino de los mejores momentos de la semana. Recomendable para gente de 1 a 100 años.
Lo peor: Que me parece que copia un poco a una serie de Cartoon Network de los 90: El laboratorio de Dexter (aunque por mucho que me pese pisotear mi infancia, reconozco que "Phineas y Ferb" es mucho mucho mejor que aquella serie del niño pelirrojo con un laboratorio infinito en el sótano de su casa. El humor de esta maravilla de Disney Channel es superior y sus personajes tienen más empaque. "Phineas y Ferb" no parece esconder de donde toma "inspiración"... pero lo mismo mismo da si el regreso a la fórmula es tan bueno como éste). Que hay algún capítulo olvidable.
Lo mejor: Candace. Algún número musical sin venir a cuento que puede hacer carcajear al espectador. El como a veces su desarrollo disparatado te mantiene en un estado de feliz y descacharrante borrachera y alucinación sana.