Al igual que con Matrix, uno ha de revisar el año de su estreno para dar crédito... 1988. Este es el año de "Cinema Paradiso", de "Rain Man", de "L'ours", de "Un pez llamado Wanda"... ¿no nos parece todo esto del siglo pasado? ¿Y "Die Hard"? Del presente.

A pesar de que los tiempos cambien, si McTiernan no hubiera hecho "La jungla de cristal", su estreno hoy provocaría otro taquillazo como el de entonces. Y es que poco han aportado sus múltiples sucesoras al imaginario social extendido.

Con un argumento simple y unos medios limitados, todo, repetimos, TODO el interés del film resulta del encanto de los protagonistas. Willis y su McClane crearon escuela, y no hay que desetimar la presencia de Reginald VelJohnson y, por supuesto, de Alan Rickman. ¿Qué hay de malo en contar con un gran actor de drama, como Rickman, en un film de acción? A la vista está que nada, todo es positivo.
El resultado es el encanto, es el ritmo, es "Die Hard".

Imprescindible.