Entiendo que mucha gente sea reacia a ver una serie como esta, porque puede parecer algo ñoña. Pero yo tengo que decir que realmente me ha encantado. Es entrañable, divertida, refleja como ninguna la relación entre una madre y su hija adolescente. Nada de tonterías de adolescentes no me malinterpreteis.

Con el paso de cada temporada llegas a crear tu momento Gilmore en el que te tumbas en el sofá, y ves unos cuantos capítulos, y te sientes bien. Es fácil de ver, y muy amigable, (es increíble que esté diciendo esto, pero ...). Sí me ha gustado mucho, y realmente me horrorizó que se acabara, después de tantísimas temporadas. Eso demuestra que tiene algo.

Yo os la recomiendo, darle una oportunidad.