Todo lo que funcionó en Casino Royale, es decir el comedimiento y realismo en diálogos acción y sobretodo en un Bond que parece más un soldado que un superhéroe de acción, lo han envuelto en papel y lo han tirado a la basura.

Se ha intentado volver a los Bonds cardíacos de antaño y sobretodo de los Brosnan y de las peores de Roger Moore manteniendo el gesto impertérrito del actor que en la anterior peli gustó y aquí resulta cargante.

En Casino Royale por lo menos el señor Craig tenía un trasfondo, lo dejaba entrever, sentía y padecía según el guión le dictaminaba y el lo transmitía, pero en ésta cinta (o cómo sea que le pueda llamar a ésto) creo que incluso el T-1000 de terminator 2 era más emocional.
Éso refiriéndome solo al actor principal (que resulta lo mejor de la peli jaja), porque si hablase de uno solo de los secundarios, patética chica Bond, patética Judi Dench, patético Giancarlo Giannini, patético villano principal y patético todo todo todo.


En fin que siendo una película precedida por una reinvención bastante chula del personaje se esperaba más indagación en aquella línea y no la cagada aburrida y patética que resulta éste Bond, de las peores sino la peor película de la saga. Las otras que fueron malas tenían algún encanto pero ésta... es un tráfico de bazofia. Un insulto a los sentidos con los que degustamos una película en el cine, y si me apuran incluso para los sentidos con los que no vemos ni sentimos ni padecemos.

Mejor buscar otra cosa en el cine.