Puede que la película flojé en muchos momentos y que la historia del guión no de para mucho más, pero, al fin y al cabo, eso es lo que hace está película, entretener durante una hora y media.

En el apartado de actores, cumple muy bien, sobresaliendo, otra vez, Gary Oldman en su papel de enano, dando el pego perfectamente y haciendo uso, una vez más, de su gran versatilidad, mostrándonos que éste señor puede interpretar todo lo que le pongan por delante perfectamente.

Me ha resultado agradable y satisfactoria las interpretaciones de Kate Beckinsale y Patricia Arquette, así como el papel del enano compañero de Oldman, Peter Dinklage. Y sobre lo nauseabundo como se me hace la sola presencia en pantalla del "actor" TeMatoiu Mecágonti (Matthew McConaughey), poco decir... cualquier otro actor con encanto y sin chulería hubiera sido mejor.

Después de todo, me ha gustado bastante, no se hace pesada en absoluto, y es entretenida y amena, perfecta para ver cualquier fin de semana.