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España España · bilbao
Voto de ernesto:
9
Romance. Drama. Aventuras Finales de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945). Un hombre herido viaja en un convoy sanitario por una carretera italiana, pero su estado es tan grave que tiene que quedarse en un monasterio deshabitado y semiderruido, donde se encarga de cuidarlo Hana, una enfermera canadiense. Aunque su cuerpo está totalmente quemado a consecuencia de un accidente sufrido en África, tiene todavía ánimo para contarle a Hana la trágica historia de su vida. (FILMAFFINITY) [+]
19 de julio de 2011
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nada hacía presagiar que el director Anthony Minghella dirigiera una película como El paciente inglés tras sus dos primeras películas, la simpática Truly Madly Deeply y la más bien olvidable Un marido para mi mujer. Con este cambio de registro tan radical Anthony Minghella consiguió que los buenos aficionados al gran cine recuperaran el entusiasmo de ver en pantalla grande una película de esas que le entran a uno por los ojos, como un auténtico huracán, donde la pasión, el romance y la aventura lucen como en sus mejores tiempos.
Basándose en una novela de Michael Ondaatje, la historia nos traslada a una época y a un lugar fascinantes. El norte de África durante los años previos a la Segunda Guerra Mundial ha dado al cine grandes películas, y en esta ocasión vuelve a demostrar que pocos lugares hay tan cinematográficos como este para contar una historia. Pero todo comienza en Italia a finales de la guerra. Allí una enfermera decide dejar el convoy en el que viaja y quedarse en un monasterio abandonado para ciudar de un paciente que está completamente quemado, y al que ya le resulta imposible viajar. Entre ellos se establece una conexión especial, en tanto que el moribundo rememora como han sido los acontecimientos que le han llevado a esa situación. Es entonces cuando la acción nos traslada África, donde este hombre trabajaba como cartógrafo. Durante una expedición por el desierto se enamora perdidamente de la mujer del hombre con el que viaja. A partir de ese momento comienza un intenso romance entre ellos con la ciudad de El Cairo como telón de fondo, donde la pasión desbordada, las dudas, los miedos y los celos desembocan en uno de los dramas románticos más fascinantes de estas dos ultimas décadas. Todo esto sucede sin perder de vista de vista en ningún momento el monasterio italiano donde la enfermera vive su particular historia de amor en medio de un ambiente enrarecido por los fantasmas del pasado.
Anthony Minghella se acerca a todo este material con la solvencia de los grandes,y desplegando su talento en las muchas aristas que ofrece la historia. El paciente inglés es una película épica, de imponentes paisajes y grandes acontecimientos en los que se desarrolla una historia íntima de una pasión amorosa absolutamente arrebatadora. El director consigue que esos dos aspectos de la historia combinen de forma armoniosa, y definitivamente magistral cuando se acerca el final. Con un estilo clásico y mucha elegancia compone secuencias imborrables que conmueven en múltiples niveles. Estéticamente El paciente inglés deslumbra y convierte a las arenas del desierto y a la cueva de los nadadores en lugares inolvidables.
(sigue sin spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
ernesto
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