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España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
6
Comedia Pearly Gates (Peter Sellers), jefe de una banda de ladrones de guante blanco de Londres, decide organizar un espectacular robo usando como tapadera una tienda de alta costura, pero un trío de inoportunos policías les arrebatan el botín. Lo mismo le ocurre a la banda del Nervios. Lo que las dos bandas ignoran es que el trío en cuestión lo forman unos gángsters australianos que se disfrazan de policías para robar a los ladrones. (FILMAFFINITY) [+]
16 de marzo de 2012
7 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
61/15(15/03/12) Entretenida comedia británica, con un aire naif entrañable, desprende una candidez notable. Es un argumento que bebe de la sencillez, cuenta como los ladrones londinenses son unas cándidos rufianes que nunca portan armas en sus fechorías, ni oponen resistencia al ser descubiertos por la policía, es un idílico mundo, pero aparece en escena una banda que se hace pasar por policías y los desvalija al salir de sus ‘trabajos’, esto provoca un caos entre la delincuencia, derivando en una reunión extraordinaria de los sindicatos del robo, el cabecilla es Pearly Gates (buen Peter Sellers), y llegan al acuerdo de pactar una tregua con la poli en la persona del inspector Fred parker (biuen Lionel Jeffries), para que estos dediquen todos sus efectivos para acabar con los intrusos. Es una disparatada bufonada que intenta reverdecer los laureles del estilo de la comedia de los Estudios Ealing ya entrados en el ocaso, no le llega a las obras emblemáticas de estos pero se ve con agrado. Es un producto ameno con escenas divertidas, basa su comicidad en la caricaturización de dos entes contrapuestos, los delincuentes y los polis, y en la punta de cada uno dos actores que destilan buen hacer, un Peter Sellers que domina el medio, desplegando una gran flema británica y que posee una gran química con el otro pilar actoral, un gran Lionel Jeffries como torpe agente. Posee un gran ritmo, muy fluido que hace nunca decaiga, con algunos diálogos ingeniosos. La escena más hilarante es su tremebundo final, una parodia de los atracos sofisticadamente preparados, acabando en una persecución que bebe de los grandes clásicos slapstick del humor mudo. Reseñar que la burlesca reunión de truhanes puede ser una sátira de la Obra Maestra de Fritz Lang ‘M’, aunque en esta el tono era algo distinto. En conjunto, una simpática cinta que no pretende más que pases un rato ameno en un mundo utópico, donde los malos no lo son tanto y los buenos polis son unos ineptos.Fuerza y honor!!!
TOM REGAN
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