Dirigida por David Zucker, la película continúa la fórmula exitosa de su predecesora, ofreciendo una combinación de humor absurdo y referencias a películas populares.

Sin embargo, a pesar de algunos momentos divertidos y risas ocasionales, Scary Movie 4 no logra igualar el nivel de las primeras entregas de la saga. La trama carece de coherencia y, en ocasiones, se queda corta en términos de originalidad y creatividad.

El humor utilizado en la película también es bastante predecible, lo que hace que muchos de los chistes caigan en clichés y sean fácilmente olvidables. Además, algunos chistes se basan en referencias culturales y eventos de la época, lo que hace que la película pueda resultar menos relevante para el público actual.

Aunque el elenco incluye a reconocidos actores cómicos como Anna Faris y Leslie Nielsen, las actuaciones no son destacables. Aunque hacen lo mejor que pueden con el material proporcionado, no hay suficiente material sólido para que los actores brillen.

En cuanto a los efectos y la cinematografía, son decentes pero no sobresalen. Scary Movie 4 recurre principalmente a la parodia de las películas de terror, pero no logra establecer una estética visual propia.

Aunque tiene momentos divertidos, en general carece de frescura y se apoya demasiado en clichés y referencias obsoletas.