Aunque algo increíble y excesiva, incluso con sus fallos "La jungla de cristal" se ha convertido en una película de acción de culto por méritos propios. Supuso el descubrimiento de Bruce Willis como héroe alejado de la comedia y en la misma mantiene un inteligente pulso con Alan Rickman.
Además, anda que no lanza puyas contra la inoperancia de la policía y el morbo que buscan los medios de comunicación.
Y para la posteridad, su mítica frase que todos sabemos pronunciar pero pocos escribir correctamente. Por si acaso, no me arriesgo.
Mi nota: 6,7