El cine slasher y terror no está pasando por su mejor etapa en este momento. En su edad dorada (década de los 80) se sentaron las bases del género que han permanecido casi intocables hasta la fecha. Como película de Slasher, “Tú eres el siguiente” adopta esas bases y no las cuestiona en ningún momento, es más, se las cree y las hace suyas.
Pero la película no es una burda copia de las películas de los 80, “Tú eres el siguiente” nos da más de lo que nos esperamos. La inteligencia y el humor negro acampan en el guión y se apropian de él, haciendo de la cinta una de las mejores experiencias en el cine de terror de los últimos meses.
La clave de “Tú eres el siguiente” no es más que su capacidad para asombrarnos en cada una de sus secuencias, ya sea, como ya he dicho, por la violencia, la inteligencia, su humor negro, pero, sobre todo por Erin, la protagonista.
Erin es la heroína del film, la novia de uno de los hijos del matrimonio Davison. Cuando saca toda esa violencia que tiene dentro, el espectador observa un festín de sangre y vísceras en el que tiene que apartar la vista varias veces, pero que, a cada escena que pasa, pide una más. Esas escenas se nos quedan grabadas en la retina y no las olvidaremos fácilmente ya que está hechas con toda la maldad de unos jóvenes guionista y director con una carrera más que prometedora. Erin es la película, es su alma y su contenido. Cuánta violencia, cuánta sangre hemos podido ver gracias a ella, además no podríamos haber disfrutado de esta genialidad de película sin su presencia porque sería una matanza familiar sin otro interés que el del espectáculo.
El humor negro es otra de las claves de “Tú eres el siguiente” ya que, con la mayor naturalidad del mundo, te hace reír en medio de un lago de sangre y muerte. No está, ni mucho menos, metido a presión en el guión. Es lo que a ciertos momentos necesita la película, algún lugar en el que relajarse, y prepararse para la ola de asesinatos que está por venir. No voy a contar el final, pero adelanto que es la mayor muestra de humor negro de la cinta, un final más que brillante para una película más que brillante.
Por todo eso “Tú eres el siguiente” no es sólo una matanza familiar, sino un ejercicio de inteligencia, gracias a un guión que no deja a nadie indiferente y una dirección con el pulso firme y decidido. Este matrimonio de dirección y guión es un cóctel explosivo que sabe qué está haciendo, sabe dónde quiere llegar y sabe dónde ha llegado. Sin duda “Tú eres el siguiente” es la película que quiere ser y la que el espectador se merece ver, un soplo de aire fresco ante las malas cintas de terror actuales. Sólo poseo admiración por ella.