Película inimitable en su género, remake de la Momia clásica de Karloff aquí conjugándolo con el toque más moderno spilveriano de Indiana Jones.

Aquí la intrépida bibliotecaria es Evelyn Carnahan y su hermano Jhonathan, mientras que el pistolero y aventurero es Rick O´Connell. La figura de Indiana se divide en tres partes de un mismo triángulo que funciona a las mil maravillas dado el gran casting que han hecho. Brendan Fraser está en la que es su mejor película, cuando todo iba bien, y ahora que ha renacido es más que interesante ver qué le deparará cinematográficamente hablando su futuro, y una Rachel Weisz que compone un personaje dinámico, cómico e intenso, todo producto de un guión trabajado hasta el último detalle con Stephen Sommers.
Como Arnold Vosloo decía en los comentarios de la película, todo el guion está volcado en casi todas las escenas, toda la carne en el asador, por eso funciona, porque no se omite nada.

La bibliotecaria Evelyn va en busca de Hamunaptra con Rick O´Connell al que ha salvado la vida y con el que tiene un trato, y allí lee el Libro de los Muertos, trayendo a la vida la temible, Momia, Arnold Vosloo, en un momento de su carrera en el que ya comenzaba a hacer trabajos más comerciales, teniendo otros en su haber como "El embrión" rodeado un año antes, y completamente una película indie, nadando siempre entre ambos géneros este actor, y en series de televisión.

Una vez despierta la momia deberá de consumar su maldición y recuperar a su amante muerta, para lo que elige a Evelyn, soñando así vivir con ella una eternidad de poder si triunfa.

La guerra se desata por ver quien logra vencer la maldición, al mejor estilo de los años 20, con efectos especiales logrados, la recreación del Antiguo Egipto incluso en el nuevo, trampas, paisajes de ensueño, una acción realmente trepidante, romance, y los cascarrillos que funcionaban, de la mano de John Hannah, horrible en "Spartacus", pero soberbio como arqueólogo fracasado.

El resto del reparto son actores célebres en la televisión como Oded Fehr o Patricia Velásquez, en apenas un cameo.

Esta película es la película por antonomasia de las momias, y la única.
La historia completa empieza y acaba aquí, porque nada de las demás tiene el guion tan cuidado como ésta, personajes icónicos como el alcaide de la prisión o Beni, tan detestables como cómicos, ni un villano tan bien construido, un antihéroe al que el amor guía.

Surgen muchas preguntas a lo largo de su visionado, pero realmente funciona y podría competir con la mejor de Indiana Jones.