Es fácil despistarse por el controvertido tema que trata la película, y opinar más de eso que de las posibles bondades del film. Éste, está bastante bien hecho, con ritmo, acertados diálogos, y eso sí, una no muy brillante actuación de Hayden (quizá no era el artista adecuado).
Lo que no puedo entrar a valorar es si el argumento es fiel a la verdadera historia porque desconozco ésta, pero como siempre opino, eso no debe ser un factor importante a la hora de valorar mejor o peor un film; a fin de cuentas, todo es ficción en mayor o menor medida.
De lo que sí me alegro (y eso tampoco debe ser un factor importante), es que se deje un poco a ras de suelo la ética periodística. A mi modo de ver, ni siquiera existe la ética para esta profesión, donde ante todo prima "el fin está por encima de los medios", y donde el dinero lo compra todo. Y eso o vemos todos los días, y a todos los niveles. No me caeis nada bien, periodistas del mundo. Nunca me fiaría de uno de vosotros.