Basada en una historia real (los datos en spoilers), esta historia de podría extrapolar a la vida real. Es cierto que ha mejorado mucho la situación, pero todavía hay personas que deben ocultar su sexualidad a compañeros y familiares para que no los tratarán de forma distinta. Lo mismo ocurre con las personas infectadas con el VIH que la mayoría de la población teme contagiarse si mantiene algún tipo de contacto con estas personas. Por lo que a nuestro protagonista tiene aún más discriminación, además se castiga que se haya contagiado por vía sexual, en lugar de la accidental. Ahora está más extendido el uso de los preservativos en las relaciones homosexuales para evitar el contagio de ETS, pero en esta época no se estaba concienciado.

Tom Hanks logra reflejar perfectamente esa persona amable, que solo intentaba ser la mejor persona posible, pero que las condiciones le han castigado y Denzel Washington ese abogado que no le importa como sea su cliente, sino que se aplique la justicia. Dos grandes actuaciones. Antonio Banderas su papel es muy pequeño por lo que no puede despuntar, pero siempre te alegra ver una cara conocida del panorama nacional.

El juicio creo que logra simplificarse lo suficiente para que cualquier tipo de espectador lo entienda, además vemos que trata una gran cantidad de situaciones y comparaciones, que como he dicho antes podrían extrapolarse a los juicios que realizamos nosotros solo guiándonos por nuestros estereotipos.

En definitiva, es de esas películas que tiene algo que enseñarte y sino por lo menos intentar ponerte en los pies de estas personas solo por un momento.