Recientemente esta película ha aumentado su popularidad debido a la trama principal de la cinta que es de desconfiar de todo el mundo ya que puede haber un traidor entre nosotros, que ha sido adaptada en mecánica en populares videojuegos y juegos de mesa. Además, a los elogios que recibió por parte del programa de Todopoderosos, creía que este era el mejor momento para disfrutar de esta obra de culto.

Centrándonos en la película, lo que más me ha gustado es que los protagonistas se comportan de forma razonable a la situación y lo mismo con la forma de actuar de la criatura. Tarda una hora en ponerse en acción, pero ese tiempo no se ha usado en vano ya que pone todas las piezas en el tablero (de donde viene, que es capaz o no de hacer…) para que así el ritmo no se detenga y la tensión sea continua. Además, la criatura tampoco quiere ser descubierta por lo que me parece acertado que se tome su tiempo.

Respecto a los efectos especiales, no sé si será por la nostalgia o porque estoy cansado del CGI, pero me gustan más los efectos prácticos. Lo único que no ha aguantado bien es la movilidad del monstruo que es demasiado pausado y el rango de movimientos es reducido en ciertas ocasiones, pero el aspecto es igualmente terrorífico y asqueroso a pesar de los años.

Es cierto que ya existían los extraterrestres que imitaban humanos en los ladrones de cuerpos, otra película que tengo pendiente, pero creo que “La cosa” de John Carpenter es la que más ha logrado perdurar tanto por sí misma como por el legado que ha logrado crear no solo en los medios mencionados anteriormente sino otros como el anime (un ejemplo de ello sería Parasyte, la cual os recomiendo). Debéis ver la película, no solo para saber si logran sobrevivir a la criatura, sino también para poder captar todas las referencias en sus herederas. Una de esas películas indispensables para cualquier cinéfilo.