Tuve la oportunidad de ver esta película antes de su estreno oficial en España. A pesar de la controversia que la rodea debido al origen israelí de la actriz protagonista, y su censura en cines musulmanes de Oriente Medio, las críticas en otros países han sido muy favorables y ha tenido un gran éxito en taquilla.

Personalmente, no la encontré tan destacable. Aunque en general todo en ella es correcto y destacable, me pareció que el guión era bastante clásico, dándome la sensación de estar viendo una película ya vista anteriormente, con la única diferencia de tener a una mujer como protagonista. Las escenas de acción son numerosas y la superheroína se muestra poderosa y ágil, aunque no es tan espectacular como Superman, sino más similar al Capitán América. Esta primera película de la saga, que tendrá continuación, nos muestra el origen del personaje y está ambientada en la Primera Guerra Mundial, con los alemanes como enemigos, ayudados por personajes peculiares, entre ellos Elena Anaya, y un Dios con poderes sobrenaturales. Por lo tanto, puede parecer una mezcla entre Capitán América y Furia de Titanes, o incluso más bien como Ira de Titanes, ninguna de las cuales me parecieron muy interesantes. También abunda el humor a costa de la mojigatería puritana y el papel de la mujer en aquella época.

La mejor virtud de Wonder Woman es que resulta entretenida, por lo que se puede recomendar verla sin ningún problema.