Una cinta cuya historia parece hecha por alguien que se acaba de dar un atracón con películas de acción de finales de los 80s y principios de los 90s, de las que iban directamente a videoclub sin pasar por cines y que en el mejor de los casos llevaban el nombre de Steven Seagal, Chuck Norris, Jean Claude Van Damme o Jackie Chan. Si a eso le añades un poco de Yakuza y un extraño amor por la película Gladiator, es normal que la digestión de ese material sea cuanto menos pesada y no se deban tener expectativas en lo referente al guion.

Rodada mostrando la ciudad de Barcelona y con buena factura y una dirección competente, el film incluye ciertos detalles y “frasecicas” que por momentos la acercan peligrosamente a ser una comedia involuntaria, pero no lo es, aún teniendo una historia que vaya de tópico en tópico del género, y no tener pretensiones, intenta ser un entretenimiento de acción disfrutable y no termina de conseguirlo debido a muchos detalles que no alcanzan el nivel suficiente, sobretodo a nivel de guion y de interpretación, que en muchos casos parece amateur a excepción de Oscar Jaenada que parece pasárselo bien en su rol, Sergio Peris-Mencheta y Juan Diego.