Humor, profundidad de los personajes, ambientación, toque español, buen doblaje... esta película es LA PELÍCULA.

Para comenzar, al igual que en la primera, he de decir que el doblaje de Antonio Banderas es grandioso sumado con los toques de humor español que rodean el largometraje de un aura de entretenimiento a cascoporro, algo obligatorio en este tipo de películas en mi opinión, además de que el perro y Kitty compaginan muy bien con Gato y crean un trío muy acogedor

Por otro lado, con el cupo de humor rellenado, pasamos a la profundidad de los personajes y su buen desarrollo, en el que el único que me falla será nuestro gran amigo Jack Horner, quien su mayor aporte a la película es la enorme cantidad de referencias por segundo a otros cuentos que añade, pero que, debido al otro gran antagonista, el lobo feroz, se le ve mermado, generando ningún interés.

Ricitos de Oro y los 3 osos tienen las escenas más emotivas de toda la película que consiguen sacarte unas lágrimas al empatizar con el deseo de la joven y la frustración que este causa en la manada; sinceramente, el mejor arco de la película.

Y, por último, el Lobo, un personaje fascinante, de los mejores que recuerdo en todo tipo de películas en relación a su propósito, como lo vive, como se remarca su presencia y cómo le afecta a nuestro protagonista felino... pelos de punta cuando recuerdo cada una de las escenas.

Para terminar, he de mencionar que es posiblemente la película animada más violenta que he visto en mucho tiempo, aunque es una violencia muy ligera a nivel visual debido a que está dirigida principalmente a un público más infantil, pero que te consigue empequeñecer el pecho y hacer caca encima. Cine para adultos dirigido a los niños.