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Voto de Hartigan:
8
Aventuras. Drama En un pequeño pueblo de Oregón, cuatro adolescentes se lanzan a la aventura de buscar a un muchacho desaparecido. Jugando a ser héroes, el inteligente Cornie, el rudo y sentimental Chris, el extravagante Teddy y el miedoso Vern se adentran en un ambiente hostil en el que deberán valerse por sí mismos. (FILMAFFINITY)
7 de agosto de 2011
19 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
He aquí una de las muchísimas historias de Stephen King que han sido adaptadas al cine, esta vez un cuento corto titulado The Body en el que se cuenta la aventura de cuatros chicos de doce años de una pequeña cuidad ficticia llamada Castle Rock, en Oregón, que en septiembre de 1959 deciden emprender un viaje en busca del cadáver de un niño desaparecido con la ilusión de convertirse en héroes y hacerse famosos.
Tomando esto como punto de partida se nos muestra una colección de situaciones y conversaciones que van teniendo lugar entre los cuatro amigos en las que se consigue captar, de forma entrañable y muy entretenida, la esencia de la infancia. Todos los sueños, problemas o preocupaciones que pueda tener un niño de doce años aparecen reflejados en alguno de los personajes del film, de tal modo que no queda otra que sentirte de alguna forma identificado con alguno de los cuatro amigos. Pero lo que mejor se refleja en la película es la amistad, la amistad siendo un niño, el tiempo pasado con los amigos, la diversión sin preocupaciones, los juegos, las travesuras y aventuras, las charlas sin sentido y las peleas sin motivo. Es imposible ver esta película sin sentir nostalgia en algún momento, sin pensar en la infancia y en cómo se va alejando cada vez más y sin desear, de alguna forma, poder volver a ella.
Una de las claves de la película es el reparto, elegido a la perfección. Todos los chavales que aparecen en la película han terminado por convertirse en caras conocidas de la industria. No deja de ser curioso ver a tipos como Sutherland, Cusack o Will Weathon en sus inicios, con 25 años menos. Los niños que encarnan a los cuatro o protagonistas están a un buen nivel, pero de entre todos ellos destacaría sin duda al difunto River Phoenix en el papel de Chris Chambers, al que interpreta con una sinceridad e intensidad increíble en un chaval de 15 años dando ya muestras de un gran talento que luego no podría desarrollar. Richard Dreyfuss pone la guinda al reparto como narrador de la historia.
Una banda sonora sesentera y a buen nivel completa el coctel, destacando la melodía mágica del tema de Ben E. King que da título al film.
Para el recuerdo quedan escenas como la del tren o el relato improvisado de Gordie, así como un gran comienzo y un gran final.

“Nunca he vuelto a tener amigos como los que tuve cuando tenía doce años. Dios mío, ¿los tiene alguien?”
Hartigan
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