Hay directores que consiguen crear en cada nueva ocasión un tipo de cine más atractivo, novedoso y emocionante. Este no es el caso de Jordan Peele. Después del bodrio de ‘’Déjame salir’’ nos vuelve a sorprender con otra nueva película aún más mediocre si cabe que la anterior.


No todo es malo. La cinta que está estructurada en dos horas consigue hacer destacar su primera hora narrando una historia que podría haber sido bastante sugerente. Todo ese rollo de tener un clon malvado oculto en algún lugar del mundo que sabe todo lo que piensas y sientes es muy interesante. Y digo podría haber sido porque se queda sencillamente en eso, en un propósito fallido. Si bien en un primer momento logra que la ‘’otra’’ familia de clones capte nuestra atención por las peculiaridades que muestra cada uno de ellos, todo se va al garete cuando descubrimos que los clones pululan por doquier en los alrededores de cada barrio y que nuestra entrañable y rarita familia es otro grupo más entre un millón…


Frases como ‘’Somos estadounidenses’’ pasaran a los hitos de la historia del cine. No obstante, lo mejor no es solo esa especie de terror baratillo que lo único que despierta en el espectador son carcajadas. Y ni siquiera estamos hablando de comedia en estado puro. Porque este híbrido que se mece entre el terror y la risa fácil es tan mutante como los monstruos que nos muestra y no consigue acertar ni en lo uno ni en lo otro. Se queda siempre a media entre lo de aterrar o resultar demasiado cómica. No feliz con eso, Peele intenta ponérsenos misterioso hacia el final de la cinta mostrándonos que toda la historia que creíamos tener construida dentro de nuestra mente en una hora y media es una mentira. Pero lo hace de un modo tan absurdo y poco coherente que a cualquiera que haya prestado la suficiente atención le parecerá patético. Un buen guionista o director habría soltado un par de pistas a lo largo de toda la cinta, habría establecido un hilo de coherencia que nos hiciera comprender que lo que presenciamos tiene algún sentido o lógica que lo enlaza a esos últimos minutos de cinta. Por el contrario, parece que su afán por sorprendernos y generar el impacto en el espectador en realidad mutila el hilo argumental, haciendo que sus intenciones fracasen nuevamente. Y es que vuelvo a repetir, el argumento inicial era tan bueno que ni siquiera necesitaba eso para destacar o ser recordado.


Sin dar más pistas que no necesito exponer y creo que nadie necesitara leer puedo decir que estamos ante una de las peores películas del año. Eso sí, es una digna sucesora de ‘’Déjame salir’’. Una pena, su argumento prometía y podría haber dado muchísimo juego con una historia que parecía ser tan interesante como la que se nos narra al inicio. Peele es bueno en sus inicios. Sin embargo, cuando empieza a desarrollar guion y película se pierde en sus intenciones iniciales y lo convierte todo en un brutal despropósito que no lleva a nadie a ninguna parte. No creo que una película tan mala como esta se merezca una crítica y menos una algo más minuciosa. A pesar de ello, siento que no solo es justificable sino que también es necesaria. Ahorrad vuestro preciado tiempo. Huid cuando leáis estas dos palabras: Jordan Peele. Lo que sigue no es nada bueno….


Es una verdadera pena ver a Elisabeth Moss, una de las mejores actrices actuales, representar un papel tan mediocre después de actuaciones suyas tan notables como la del cuento de la criada…