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España España · Jaén
Voto de JACHi:
5
Comedia. Ciencia ficción Unos extraterrestres malinterpretan las imágenes de las máquinas recreativas como una declaración de guerra y deciden atacar la Tierra, empleando dichos juegos como modelos para el asalto. El presidente de Estados Unidos, Will Cooper (Kevin James), recurre entonces a su gran amigo de la infancia y campeón de las maquinitas de los años 80, Sam Brenner (Adam Sandler), quien actualmente trabaja como instalador de sistemas de home cinema, ... [+]
15 de agosto de 2015
6 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Querido... En fin, tú:

Antes de empezar con lo que es mi opinión acerca de PIXELS, te digo: tontopollas, imbécil de mierda, soplagaitas, guarro, chulo putas barato, payaso sin gracia, subnormal asqueroso y estúpido mediocre.

Eso de buen rollo, ¿eh? Sin entrar en faltas personales hacia el cretino integral que debes ser en tu vida cotidiana.

Hago repaso a tus películas y me parece absolutamente increíble. ¿Has sido el "actor" mejor pagado de Hollywood? Joder, ni una de tus mierdas es capaz de sacarme una leve sonrisita... Bueno, la de CLICK y BEDTIME STORIES puede que tuvieran su aquel.

Y es que según parece esa imbecilidad (sin gracia, nuevamente) de SATURDAY NIGHT LIVE tiene un éxito descomunal en Estados Unidos. Y cualquier mamarracho que haga el gili en dicho programa, parece ser que luego peta las salas de cine. Es algo de lo que se está tomando "buen" ejemplo en España, poniendo a humoristas de discutible talento al frente de carísimas producciones. Como siempre en nuestra amada patria, imitamos lo mejor.

Bueno, como decía, que a raíz de eso te contraten para capitanear el reparto de comedias basura del tipo ESTE CUERPO NO ES EL MíO o 50 PRIMERAS CITAS, pues lo comprendo. Hay que vender gasolina que meter al coche con el que llevar a los críos al centro comercial; hay que vender zapatillas porque el niño las ha visto en el escaparate, y un estuche de Hello Kitty que la niña ha visto también; hay que vender pizzas, pa que la familia esté bien alimentada de mierda industrial; hay que vender latas de Pepsi Light para hacer más llevadera la espera en la cola de la taquilla; hay que vender las entradas (lo más asequible en todo este tinglado); hay que vender palomitas con sustancias raras dentro; y en definitiva, hay que hacer porque el tipo triste de la gasolinera, porque el dependiente de la tienda de deportes y la dependienta de la tienda de complementos, porque el pobre chaval que hace la masa de las pizzas, porque los tíos que reponen la máquina de refrescos, porque los encargados del cine, y porque los chicos del puesto de chucherías disfruten de un sueldo que les permita vivir dignamente, y participar de vez en cuando de esa rueda en la que también son engranajes.

LO ENTIENDO, de verdad. Cierto es que cuando mis amigos en el instituto me vinieron exaltados con que tenía que ver la mejor peli de risa de todos los tiempos (LITTLE NICKY), no daba crédito de lo putísima mierda que era esa película y de hasta qué punto no me reí de NINGUNO NINGUNO de los supuestos puntos que tenía. En fin, cuestión de gustos.

Supongo que ese rollo pasota-moderno-retro-poco aseado de cuya renta vives desde UN PAPÁ GENIAL, les atrae a muchas mujeres reprimidas que se casaron con lechuguinos calvos y más sosos que una pinza de la ropa pero con buenos trabajos. "Es tan cool, le da todo tan igual, es súper gracioso". Está bien, puedo entenderlo también, los gustos de las mujeres muchas veces escapan a mi entendimiento (50 SOMBRAS va cerca de los 600 millones de pavos).

Lo que no quiero entender es por qué hostias esta medianamente bien pensada comedia familiar con toques nostálgicos, efectos especiales chulísimos y gags graciosetes, tuvieron que arruinarla con tu innecesaria y repelente presencia. Si hay algunas cosas que no funcionan bien en el film, como una duración excesiva, tomarse demasiado en serio a veces (lo que en una peli sobre que los extraterrestres mandan a Donkey Kong para destruir la Tierra resulta ridículo), una tía florero y poco carismática, y un romance absurdo, desde luego, la cara de fumado (y borracho, seguramente) de Adam Sandler termina por echar abajo la propuesta. En serio, no interpreta en absolutamente ningún momento, sólo pone su cara de tío guay-pasón que se lleva bien con los niños porque no se afeita y habla con lenguaje pasota a los 48 años. En fin, actor cómico sin ninguna puñetera gracia, al que encima ponen de conquistador, lo que es un disparate. Como principal en una comedia con toque romántico, es de entrada un completo fracaso. Pero aún así lo han hecho y les ha dado igual. Por lo tanto, una gran lástima. Insisto en que la peli tenía posibilidades.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
JACHi
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