Quien te cantará es el tercer film de Carlos Vermut donde nuevamente despliega todo su universo personal, marca de autor y estilizando su puesta en escena a niveles magistrales. Vermut, ya dio muestras de un personal universo, bizarro y oscuro en sus anteriores films Diamond Flash (2011) y Magical Girl (2014). Y de una inteligente habilidad para construir personajes y situaciones particulares.

La historia de una famosa cantante (Najwa nimri) amnésica que recurre a la ayuda de una imitadora y fan suya (Eva Llorach) es solo la punta del iceberg de un enigmático puzzle de identidades con muchas capas de lectura.

Quien te Cantará es una vuelta de tuerca más a las atmósferas hipnóticas de films como Vértigo, o el costumbrismo magnético de algunos films de Almodóvar. Vermut hace un ejercicio de estilo brillante en la composición de encuadres, utilizando espejos, fotos, pantallas, cristales, ventanas para ilustrar el proceso de composición de identidades (copia y original, personaje y reflejo, dobles, amnesias, intercambio de roles) con el que juega constantemente, otorgando al film una densidad y profundidad dramática y simbólica que pocas veces podemos disfrutar en el cine español.

Sus actrices (Llorach espectacular) comunican a la perfección esa sensación de desgarro interior, de desasosiego, a lo que contribuye la hipnótica banda sonora compuesta por Alberto Iglesias (a base de flauta travesera) y la intensa emoción que transmite la voz de Eva Amaral (que dobla a Llorach cuando canta). La escena del travelling circular de Procuro Olvidarte rubrica fascinantemente todo el artefacto narrativo construido por el film en una de las mejores escenas de la película.

Simbolismo, artificio, claustrofobia. Quien te cantará desborda magnetismo visual y sonoro como talento e inteligencia en su puesta en escena. Una reflexión sobre la construcción de la identidad, las relaciones materno-filiales, la fama… las capas son infinitas. Una lección de cine