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Voto de Mauri:
3.634
Thriller. Acción
El mundo entero está presenciando el primer viaje tripulado a Marte sin saber que se trata, en realidad, de un simulacro. Los tres astronautas designados para la misión se ven obligados a participar en la farsa, porque sus familias están amenazadas. El fraude parece funcionar hasta que un técnico de la NASA se da cuenta de que está sucediendo algo extraño y, con la ayuda de un periodista amigo suyo, decide investigar... (FILMAFFINITY)
18 de septiembre de 2020
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Capricorn One es uno de esos films conspiranoicos de los años 70 que surgieron a raíz de las teorías de que el alunizaje del Apolo XI fue una farsa.
El film hibrida géneros: thriller político, acción, denuncia social y un toque de comedia. Su director, Peter Hyams sabe mantener un buen pulso narrativo a una trama doble: Los astronautas y toda la farsa que monta el estado, y la investigación del periodista que duda de todo. Las tramas convergen en la parte final del film que contiene una de las mejores escenas de acción (la persecución de los helicópteros) mejor rodadas de la época. La excelente música de Jerry Goldsmith hace crecer el film potenciando la tensión.
El film parte de una premisa brillante. La farsa urdida por el poder político se presenta verosímil, al plantearla desde unos motivos tan lamentables como plausibles (quedar mejor en la carrera espacial ante los rusos).
El guión (del propio Hyams) contiene diálogos inteligentes y unos personajes acertados (Magistral dinámica sarcástica entre los personajes de los periodistas que interpretan Elliot Gould, Karen Black y David Doyle) que aportan los momentos de comedia.
Es una pena que Hyams no se atreva a ir más lejos en algunos aspectos (denuncia de la hipocresía del poder político, reflexión sobre la veracidad en los medios), lo que hacen del film un entretenimiento bien construido pero lo alejan de ser la obra maestra que podía haber sido.
El film hibrida géneros: thriller político, acción, denuncia social y un toque de comedia. Su director, Peter Hyams sabe mantener un buen pulso narrativo a una trama doble: Los astronautas y toda la farsa que monta el estado, y la investigación del periodista que duda de todo. Las tramas convergen en la parte final del film que contiene una de las mejores escenas de acción (la persecución de los helicópteros) mejor rodadas de la época. La excelente música de Jerry Goldsmith hace crecer el film potenciando la tensión.
El film parte de una premisa brillante. La farsa urdida por el poder político se presenta verosímil, al plantearla desde unos motivos tan lamentables como plausibles (quedar mejor en la carrera espacial ante los rusos).
El guión (del propio Hyams) contiene diálogos inteligentes y unos personajes acertados (Magistral dinámica sarcástica entre los personajes de los periodistas que interpretan Elliot Gould, Karen Black y David Doyle) que aportan los momentos de comedia.
Es una pena que Hyams no se atreva a ir más lejos en algunos aspectos (denuncia de la hipocresía del poder político, reflexión sobre la veracidad en los medios), lo que hacen del film un entretenimiento bien construido pero lo alejan de ser la obra maestra que podía haber sido.
