“Chef” es una curiosa combinación de muchos ingredientes, mezclados con demasiado acierto como para ser fruto de la casualidad que uno podría esperar de un director no demasiado famoso como John Fravreau, conocido sobre todo como actor en papeles secundarios y, para el que se tome la molestia de investigar, por haber dirigido una o varias de las “Iron man” del Universo Marvel. Sí, el nombre de Favreau es pintoresco pero casi nadie lo asocia a nada relevante. Incluso muchos de los que conozcan su relación con Iron man pensarán que bah, que sí, que es una muy buena película, pero los que realmente se lo curran son Robert Downey Jr., los guionistas y los responsables de efectos especiales. Y puede que tengan razón.

O puede que se equivoquen miserablemente y John Favreau sea un caso de tío competente habitualmente eclipsado por las circunstancias. La verdad es que “Chef” da que pensar, porque está escrita, dirigida y protagonizada por él mismo y una vuelta a la esencia del cine de contar una historia de una manera que todo el mundo la entienda y con el estilo más atractivo posible que induzca a la gente a verla. De entrada, la historia sí que engancha porque de un tiempo a esta parte, todo lo ambientado en el mundo de la cocina es éxito asegurado, pero Favreau introduce elementos conocidos (el genio que toca fondo, el volver a la cima empezando otra vez de cero, el padre que no quiere volver a decepcionar a su hijo) y los condimenta con conceptos como lealtad, compañerismo, pasión y profesionalidad para terminar llevando todo a la pantalla con una estupenda fotografía y un ritmo endiablado, sin un momento de respiro ni de silencio, siempre con mambos, chachachás y sonidos latinos como acompañantes de un viaje donde la cultura latina (gastronóminca, musical) es un acompañante más.

Porque aunque “Chef” parece (y es) una mezcla de muchas cosas (road movie, buddy movie, family movie, foodie movie…) todos lo sabores, colores y texturas están perfectamente definidas y son perfectamente identificables, no se trata del típico batiburrillo de microhistorias para saturar. Ves “Chef” y caes en la cuenta de que también Iron man era más, mucho más, que robots por aquí y por allá, peleas por aquí y por allá. Algo de mérito debe de tener este Favreau, que por momentos da la sensación de ser la versión americana de Santiago Segura, capaz de embarcar a un montón de amiguetes (Vergara, Downey, Scarlett…) en cameos que den vistosidad a su obra.

“Chef” es una película para ver solo, en familia, en pareja, con los niños o con amigos en cualquier momento y circunstancia. Optimista, amena y de buen gusto. No es una comedia en sentido estricto pero arranca sonrisas (y risas) de la pura complicidad que desborda y que todo lo inunda. Favreau, un tío a tener en cuenta. No será porque no nombre no es reconocible...