Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid
Voto de OsitoF:
3
Comedia Bazil es un tipo que ha logrado esquivar la muerte dos veces en su vida. Cuando era niño sobrevivió a una mina antipersona, aunque su familia no tuvo tanta suerte. Siendo un adulto, una bala perdida se incrustó en su cerebro. Con la colaboración de unos artistas callejeros, intentará vengarse de las compañías armamentísticas que tanto daño le han hecho. (FILMAFFINITY)
30 de marzo de 2015
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
MIcMacs: Jean-Pierre Jeunet, es un director que, aunque se prodiga poco, ha sido el responsable de buenas películas que se han convertido en iconos como la archiconocida “Amelie” y “Delicatessen”. También es cierto que es un hombre que no hace ascos a aprovechar el rebufo de sus éxitos y hacer películas muy similares, con los mismos protagonistas con distinto nombre o la misma estética con distinto collar, a ver si sigue la racha (ejemplos: “La cuidad de los niños perdidos” o “Largo domingo de noviazgo”). “Micmacs” es una combinación, varios años después, de sus mayores éxitos, con los grafismos exagerados, recargados de “Delicatessen” con una historia buenrollista de protagonista de moda (Dany Boon) tipo “Amelie”.

El resultado es, salvo para incondicionales de este hombre, una chuminada de proporciones faraónicas, el equivalente en ‘horterez’ a las pirámides de Egipto. Un argumento delirante de una panda de descamisados que se enfrentan a las empresas militaristas francesas con artilugios fabricados a mano con deshechos de la sociedad. ¿Ecopacifismo? ¿Antibelicismo? ¿Anticapitalismo? Sí, todo eso y sobre todo mucho populismo facilón y demagogia de bajo coste. Muy complicada para niños y muy infantil para adultos, es muy difícil que conecte con nadie que podamos considerar un “espectador medio” porque no parece estar hecha para satisfacer al espectador sino a su creador, que busca (y hay que reconocer que consigue) un perfeccionismo estético que no tapa su vacío argumental
.
“Micmacs” es lo que su director ha querido, un ejercicio de virtuosismo a costa de ritmo y credibilidad, y se nota que a los actores les ha gustado porque su pasión se nota en cada plano. Su problema es que parece hecha por y para su director, para cubrir una carencia de afecto, una necesidad de cariño, de aplauso y no para ofrecer algo o contar algo. Cada giro, cada anécdota, cada escena buscan el aplauso individual, no hilvanar una historia como un todo.

Claro ejemplo de película-globo, muy vistosa por fuera y llena de aire por dentro. Aire rancio, además, ya pasado de moda. Estomagante de tanto buen rollo y cabreante por suponer una absoluta pérdida de tiempo.
OsitoF
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow