Esta serie es sencillamente magnífica, toda una obra de arte llevada a la perfección por Vince Gilligan.
Breaking Bad no es simplemente la historia de un un profesor de química, que tras verse expuesto a un cáncer de pulmón se adentra en el mundo de tráfico de drogas para sustentar a su familia. Breaking Bad te adentra en la compleja personalidad de los personajes, llena de dilemas morales. A lo largo de esta serie puedes ver el desgarrador cambio de como el novato, tenue y monótono Walter White se va transformando en una persona sin miedo, fría, tenebrosa y sin escrúpulos.
Cambio que también ocurre en el caso de Jesse, una persona inexperta que se ve obligado a madurar con las cosas que ve y debe de hacer en el mundo donde se ha metido.
Para mi esto es lo que hace grandiosa a esta serie, los oscuros cambios en los que se ven envueltos los protagonistas, que te hacen estar enganchado a ella desde el minuto 1 y te hace plantearte una pregunta: ¿en qué se va a convertir el profesor?
Por no hablar de la magistral interpretación de Bryan Cranston, el gran guión con el que cuenta la serie y el reducido presupuesto con el que han contado para llevarla a cabo.
Ademas, esta serie da cabida a diversas cuestiones morales, las cuales se va planteando el espectador a medida que avanzan los capítulos, como por ejemplo: ¿El fin justifica los medios?
Me gustaría finalizar esta crítica con una gran frase de Walter White, con la que te das cuenta del cambio que da este personaje:
"He pasado toda mi vida con miedo, preocupado, por las cosas que podrían o no podrían pasar. 50 años he vivido así. A veces me despierto a media noche...pero sabes...desde que me dieron mi diagnostico duermo muy bien, me he dado cuenta de que el miedo es lo peor de todo... es el verdadero enemigo"