Avanzó el calendario hasta que Quentin Tarantino nuevamente echó a rodar su talento fílmico y montó este western muy en su estilo, donde da rienda suelta a una trama de intriga en un contexto poco habitual. Una mezcla al menos, interesante.

Y es que el amado/odiado director estadounidense parece haberle timado el gusto al salvajismo del far west y acorde a los entornos donde sus personajes no respetan las leyes, quiere extender la luna de miel que disfrutó con “Django sin cadenas” (2012).

Ahora ante “Los 8 más odiados” (2015) la evaluación tiene claros y oscuros; por una parte se reitera el gusto de Tarantino por la sangre y algo de salvajismo explícito presente desde la doble entrega de “Kill Bill”, con un contexto que se puede entender, no obstante la duración que supera por largo las dos horas puede ser una contra.

En esta teatral presentación con acotados protagonistas por largos tramos (deja vú de “Perros de la calle”), Tim Roth, Samuel L. Jackson y Michael Madsen son solo algunos de los viejos conocidos más acertadas introducciones en este menú que por presentación entra fácilmente: Tarantino, Ennio Morricone, elenco destacado, etc., pero los balances pueden no ser para todos los públicos.

La mencionada presencia de violencia, diálogos oscuros, excesos provocadores y otros tips la hacen recomendable para seguidores del director, de su estilo, de quienes gustan de las intrigas y en este caso de un particular western de nieve. Para el resto puede ser lenta, ya que deja pasar mucho tiempo antes de tomar sentido, sin siquiera exhibir algo de la promesa sobre lo que viene.

No es lo mejor de Tarantino pero es cine de su sello. Eso es suficiente para garantizar al menos un puñado de momentos notables y si quiere saciar su curiosidad sabrá concordar en cuanto a sus lagunas e irregularidades.

Recomendación:
Aceptable, tiene aspectos interesantes pero no es de gusto universal ni tampoco lo mejor de Quentin Tarantino.

=Cité de Lord Buyinski= www.buyinski.wordpress.com