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España España · Córdoba
Voto de i42poloj:
8
Drama Rocky Balboa es un desconocido boxeador a quien se le ofrece la posibilidad de pelear por el título mundial de los pesos pesados. Con una gran fuerza de voluntad, Rocky se prepara concienzudamente para el combate y también para los cambios que acabarán produciéndose en su vida. (FILMAFFINITY)
3 de marzo de 2016
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta película es al mismo tiempo muy simple y muy especial. Tiene muchos elementos que la harán perdurar para siempre en la historia del cine. A saber:
- Lanzó a la fama a Sylvester Stallone. Es su primer título importante.
- Popularizó el deporte del boxeo, que siempre fue algo minoritario.
- Es la creadora de un subgénero. Puede que hubiera otras anteriores, pero el cine de boxeo tiene aquí uno de sus más importantes puntos de partida.
- No olvidemos que es ganadora de algunos Oscar, incluyendo el de mejor guion original del mismo Stallone, aunque pueda parecer mentira.
Hasta ahí tenemos parte del bagaje objetivo del film. Pero en un título tan mítico como éste, hay que tener en cuenta no solo lo que la película es en sí misma, sino los sentimientos que transmite al espectador.
Estamos ante una franquicia que, en 2016, cuenta con nada más y nada menos que siete entregas. De esta forma, el mero hecho de ser la primera, ya es un mérito de por sí. Quizás no sea la más divertida ni la más recordada. De hecho, es un puro drama en el que realmente el boxeo termina siendo lo menos importante de todo. Aún así, hay que reconocer que Stallone acertó con el personaje y con su historia, ya que fue capaz de crear un mito.
Rocky es uno de esos personajes de cine que tocan la fibra sensible del inconsciente colectivo y permanecen para siempre en la memoria. Es un icono mundial, pues es más o menos conocido por todo el mundo, incluso por aquellos que ni siquiera hayan visto el film. Al igual que hizo Spielberg con su tiburón y la música de John Williams (recordada y tarareada por todo el mundo alguna vez que ha ido a la playa), la canción de “Rocky” está grabada a fuego en la mitología popular. La mayoría de las personas que hayan corrido por la calle, seguro que alguna vez han recordado esta música y emulado al personaje en su entrenamiento por las calles de Philadelphia. Este escenario urbano, cantado muchos años después por Bruce Springsteen en la película de Tom Hanks, parece formar parte también de la historia, como triste telón de fondo para la triste (en principio) vida del protagonista.
A todo este cóctel hay que agregar el elemento de la nostalgia. Estamos hablando de una película de 1976, que muchos vimos a lo largo de la década de los 80. Ciertamente esta primera entrega es básicamente un drama de superación personal en el que el combate solo dura unos pocos minutos del final. Pero eso no quita que sea muy especial para los que conocimos la saga siendo niños, de manera que Rocky era uno más de esos héroes que llenaban la imaginación de la infancia. Aunque, respecto a esto, tengo que reconocer que, como niño, me gustaron muchísimo más las tres siguientes.
El protagonista es adorable. Es un boxeador muy pobre, que se mueve entre bares de mala muerte y trabaja para gente de mal vivir. Se toma la vida con filosofía y optimismo, y cae bien en cuanto escuchamos sus monólogos y chistes malísimos. Me gusta mucho su relación con el personaje de Talia Shire, una “mindundi” maltratada psicológicamente por su hermano. Se fija en ella y es capaz de cambiar su aburrida vida en algo mucho mejor. De esta forma, la superación personal de Rocky como boxeador va en paralelo a la de Adrian saliendo de su limitado mundo.
Al mismo tiempo, tenemos al anciano entrenador, que no parece haber llevado una vida demasiado interesante, y gracias al futuro combate contra Apollo Creed encuentra una razón para seguir vivo.
En conjunto, es una historia un poco triste, pero que trata de que la esperanza es lo último que se pierde. Hasta los peores fracasados pueden llegar a mejorar su vida si luchan con todas sus fuerzas por superarse a sí mismos.
No todo es estupendo en la película, eso sí. No me gusta que se tiren todo el tiempo esperando a que llegue el gran combate, y llegado el momento se quede la cosa en unos pocos minutos que están muy lejos de la espectacularidad de los enfrentamientos de las sucesivas entregas de la franquicia.
Además, creo que no está demasiado bien hecha la pelea, pues en muchos planos las propias cuerdas del “ring” interfieren en la fotografía. Encima, muchas veces se nota que están fingiendo los golpes y a simple vista se nota que ni siquiera se están rozando. Para ser un gran título de boxeo, el boxeo no está muy bien filmado.
Pero bueno, eso son pequeños defectos de una película bastante buena.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
i42poloj
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