Lamentable adaptación de unos de los grandes clásicos de la Marvel.
Mark Steven Jonson consigue el más difícil todavía: aburrir contando las andanzas de Matt Murdock, el ciego más carismático de la ficción estadounidense. Y es que a Stan Lee, productor ejecutivo del film, hace tiempo que se la trae al pairo lo que hagan con sus personajes, mientras previamente pasen por caja. Sólo hay que visionar otros sonoros destrozos como “Hulk” o “Los cuatro fantásticos”.
Solo se salvan los minutos iniciales del metraje, muy probablemente debido a que se narra la infancia de Murdock, por lo que no sale Ben Affleck.
¡Ben Affleck! ¡No, peor! ¡Ben Aflfeck embutido en un traje de cuero dos tallas menor de la que gasta! En serio Mister Lee, si es una broma, no ha tenido gracia.
A esto súmenle unas escenas de acción irrisorias y el toque de pastel de manos de Jennifer Garner y ya tenemos el mojón con pelo que hoy he tenido la desgracia de tragarme. Aléjense de ella. Es un consejo.