Puede que nunca unas plumas, y otros elementos biológicos, hayan escrito jamás historias tan picantes y estimulantes sobre el placer y el dolor, ese arte sexual que lleva a lo perverso, a veces depredador, a veces presa, el tráfico de escritos entre sábanas de manicomio, un idealista se aleja de la diplomacia, el conde prohibido, el conde carnal y excesivo y el doctor candidato a reformarlo mediante primitivos métodos agresivos, así como su relación sentimental, hombres y mujeres corrompidos por su naturaleza o por sus experiencias o ambas o quizás ninguna, "Quills" utiliza plumas incendiarias pero siempre con talento, todo en un entorno subterráneo demente.

El precio del erotismo, la propina del placer, prosperar en cautiverio, la única manera de purgarse es dejarlo que publique, que se exprese, pero toda Francia se entera y merece un castigo para no caer avergonzados ante el mismísimo Napoleón... luego destaco por encima de todo que se trata de una historia de ángeles y demonios que conviven con nosotros pero que son imposibles de diferenciar, de ahí la obra titulada "Los crímenes del amor" en clara alusión al doctor, viene a decir que todos amenazamos, incluso cuando comprometemos a las personas, lo que aquí lo principal es mantener una constante erección.

El sufrimiento del pecado, la desesperación y otros intereses, es posible la curación?... es posible complacer a una monja con lo material?..., me parece que algunos personajes son impuestos y no se adaptan a esta obra que en cualquier momento hace crujir la hoja, pero no es menos importante retratar cómo se crece un artista en circunstancias adversas, todo en una época dónde el cine siempre ha plasmado el libertinaje y dónde los poderes parecen más evidentes, aunque nunca llega a poner a combatir de verdad a la iglesia contra la ciencia.

La salvación de algunos es el castigo de otros, una vez leídos, esos textos quedan memorizados y tienen sus repercuciones, algunos pajaritos abandonan la jaula, la inspiración es la venganza en el relato más impuro jamás contado, filtrado por desequilibrados, expresado desde la locura, creado para la destrucción, como desatado por la furia del diablo, una recreación del más sucio instinto natural humano, todo alrededor de una virgen y otros pobres diablos que consiguen que sea una película aterradora, que supera las espectativas y que definitivamente se convierte en psicopatía de analizar.

Todo lo que ocurre es autóctono en "Quills", para plasmar en el cine este tipo de literatura no creo que hubiera otro camino que resaltar esta biografía de un encerrado, de lo contrario no hubiera visto jamás la luz, de otra manera ese rostro del mal no habría encontrado la libertad desde el delirio, qué es el delirio?... una virtud?... un vicio?...