Haz click aquí para copiar la URL
España España · Pasajero 58
Voto de floïd blue:
3
Romance. Comedia Frances Mayes (Diane Lane) es una escritora de 35 años que vive en San Francisco cuya perfecta vida acaba de dar un giro de 180 grados. Su reciente divorcio le ha causado una profunda depresión y un bloqueo creativo. Patti (Sandra Oh), su mejor amiga, empieza a preocuparse y decide regalarle una estancia de diez días en la bella Toscana, en Italia. Una vez allí, Frances se encapricha de una villa llamada "Bramasole" (“que anhela el ... [+]
17 de mayo de 2021
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
No es lo que uno puede esperarse. A mí me gusta ver a la gente feliz y que disfrute de la vida. Ver a gente guapa, bonitos parajes y situaciones divertidas, no tengo problema. Y si uno es feo pues que haga los recados de noche, como decía una compañera.
Habrá gente que se sulfure porque mientras unos llegan aquí, a la Toscana, como emigrantes, a currar de albañiles sin serlo (en su Polonia natal eran profesores de música o de letras clásicas o cosas así, gente ilustrada con carrera pero que por pura casualidad no hacían carrera), esta mujer, americana, triste porque le ha dejado el marido, que se rascaba el... todo el santo día como único quehacer, llega aquí con pasta, con dólares, le da el antojo y le compra una casa en las afueras a la señora condesa, una casa con jardín y mochuelo y se pone a tocar las maracas.
A vivir que son dos días. Sí, a vivir del cuento. Quema un poco que haya gente que viva del cuento y otros no lleguen a final de mes. Pero este es el argumento y puede aceptarse como algo real, porque es así, es una propuesta sin más, una mujer treintañera como Diane Lane, guapita de cara y con pasta, que cambia de aires gracias a su amiga la chinita que se lo aconseja. Otros más prosaicos pues en vez de ir a la Toscana se van al bar de la esquina (al querido Bar Reynolds) a olvidar un rato la puta vida que les ha tocado vivir.
El problema es que el argumento es calamitosamente plano. Es una película situada entre Un buen año (2006), en la que en vez de mochuelo había alacranes, y la serie documental de televisión: Las recetas de Julie; la francesita esa que se reúne con parroquianos del lugar a zampar sin duelo, que no sé como no está gorda la tía a punto de explotar. En esa serie de cocina, Julie visita a gente adinerada, educada y con mucha sapiencia culinaria, se ponen a cocinar y luego no paran de zampar. Aquí igual, lo mismo, por lo que se demuestra que la vida es así para muchos, que existe esa gente, que son reales. Unos y otros, en familia, todos contentos, comiendo manjares con un exquisito paladar que da fe de ello; se reúnen alrededor de una mesa gigantesca en el prado, con las vacas por ahí, mirándolas lascivamente porque saben que a poco sus chuletones estarán en el plato, y hala, a zampar, a reír, y venga a beber, todo es paz, felicidad y armonía. Ni un cuesco, ni un eructo. Y los feos, pues a protestar en este tipo de web peliculera.
Pues nada, que para ver esto ya tengo a Julie en la 2.
También hay que decir que la Toscana tampoco es para tanto, el pueblo que sale es muy parecido a Frías (Burgos), qué digo, Frías es mucho más bonito y encima tiene castillo. Y, por último, lo que condeno es que me he perdido al final con qué tío se va la señoritinga porque todos eran iguales. Han buscado a los más guapos de Italia para que se los rife y le toque el que le toque, acierte. Entra uno y sale otro y al final no sé por dónde iba la señorita Diane ni con quién se queda. Total, que me he dicho: ¿Y a mí qué me importa?
floïd blue
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow