Indudablemente, la mejor de la trilogía. Steven Soderbergh se pone al frente de un más que digno remake de un clásico de los 70, típica pieza de género de un atraco imposible a un casino por una especie de Dream Team de atracadores de guante blanco, para lograr un verdadero taquillazo que le valió secuelas y prestigio.

Con una alineación a prueba de bomba (George Clooney encabeza como Danny Ocean, pero hay muchos más, Matt Damon, Brad Pitt, Julia Roberts, Bernie Mac...), la cinta narra como este once de galo se enfrenta a un despiadado e inteligente maganate (caracterizado muy bien por Andy García). Con colores claros y oscuros, se narra con buen ritmo y agilidad una obra entretenida y que mantiene buenos diálogos, radicando en su simplicidad la clave del éxito.

Mucha gente cool y el lujo de tener casi de reservas a titulares indiscutibles como Casey Affleck, creando una trama varias veces vista, pero con la dosis necesaria de aventuras, amoríos y compañerismo de esta "misión imposible".

Siempre he pensado que, buen gusto al vestir al margen, Danny Ocean no tenía tantas virtudes como querían hacer parecer las películas, en realidad, su gran habilidad era rodearse del mejor talento a su alrededor.

Eso y no estorbarle, dejar cumplir su misión. Exactamente eso hace Soderbergh con este equipo, para un producto prefabricado, empaquetado y muy jugoso en una cartlera. Muy recomendable para los amantes de este tipo de obras.