Juego de patriotas

Phillip Noyce dirige este apasionante thriller basado en el best-seller del escritor Tom Clancy. Un thriller protagonizado por un experto del genero como Harrison Ford que interpreta al agente de la CIA Jack Ryan que tras verse involucrado en un atentado deberá enfrentarse a los terroristas que buscan venganza.
Es una película angustiosa, emocionante y llena de tensión con una compleja trama que te mantiene en vilo hasta el final, sin duda lo mas destacado está en la elección del reparto donde a parte de Ford destacan las apariciones de Anne Archer como esposa del protagonista, Richard Harris y Sean Bean mas conocido por interpretar a los míticos Boromir de "El señor de los anillos" o Ned Stark de "Juego de tronos".
"Juego de patriotas" es en resumen un buen ejemplo de los múltiples thrillers que se rodaron en la década de los 90, una década donde este tipo de películas conseguían llenar los cines durante semanas, no como ahora donde la calidad brilla por su ausencia. Muy recomendable.

Nada nuevo bajo el sol, solo que este sol calienta menos que un brasero. "Juego de patriotas" no da para calificarla ni como digno entretenimiento, ni como salvífico exponente del terrible cine de acción (aquí el ramalazo de espionaje también) USA de los 90 hasta ahora.
Estamos ante un thriller de acción/espionaje estereotipado, trillado y tópico, inefablemente inspirado en el inefable autor de best-sellers del momento -aquí, Tom Clancy-, una película de tufillo indiscutiblemente americano y americanizante, dónde la probada solvencia de Harrison Ford, aquí en el papel del plano ex-agente de la CIA Jack Ryan, no salvan del naufragio absoluto a esta mediocre película de ideas muy cercanas al más rancio conservadurismo, dónde el IRA queda hecho unos zorros de forma penosa, y dónde hay una exaltación patrioterista tan engañosa como la de enarbolar en cada momento una bandera o un brazo en alto: la patria de la familia. Ay, Dios mío, si al menos hubiera habido alguna idea o nimio brote de talento tras ello. Estos americanos...

Interesante thriller protagonizado por el casi siempre notable Harrison Ford, con la buena colaboración de Sean Bean en el papel de terrorista sin escrúpulos.
A pesar de tratar sobre el grupo terrorista IRA, se podría decir que la película se centra en desarrollar la trama principal dejando de un lado las características o ideología del IRA que pueden ofrecer otras producciones, por lo que yo la consideraría simplemente como un thriller.
Es una película correctísima en todos los aspectos pero que no destaca específicamente en ninguno exceptuando la excelente música de James Horner en su paso previo a la oscarizada Braveheart

Se preocupa en exceso y de una forma poco creíble de desmarcar a la organización irlandesa IRA. Además las escenas que resuelven el final de la trama en la casa del protagonista están llenas de personajes que aparecen y desaparecen; casi por arte de magia los terroristas hacen y deshacen a su antojo y eso que se encontraba entre los asistentes un personaje político de gran altura. Y todo para que al final se produzca la persecución clásica y manida entre bueno y malo.

Jack Ryan, ex agente de la CIA, de visita en Londres con su familia, es testigo del atentado llevado a cabo por el IRA contra lord Holmes ante el palacio real. El terrorista Paddy Miller muere de un balazo de Ryan y su hermano Sean es detenido y condenado pero escapa camino de la prisión. El terrorista moverá cielo y tierra para vengar a su hermano muerto hostigando a la familia del ex agente, lo que forzará a este a pedir el reingreso en la central de inteligencia. La CIA pone a su disposición todos los dispositivos para eliminar al miembro del IRA, incluyendo la reprogramación de la red de satélites artificiales. Las últimas escenas están dedicadas al acoso que el IRA hace sobre el domicilio familiar de Ryan

Esta película en inicio prometía ser una de terrorismo del IRA pero al final se queda en una de intriga a la americana. Es poco creíble que la CIA, por mucho que estimara a su ex agente, le permita el reingreso para que pueda defenderse contra la venganza del IRA. No es creíble la reprogramación de satélites para vigilar los entrenamientos en Libia, gafas de visión nocturna, lanchas de diseño, contra espías en las oficinas de la CIA. El director es muy superficial presentando el terrorismo del IRA. Se pone más atención en las persecuciones y ataque a la vivienda de Ryan que otros efectos del terrorismo. En realidad ésta es una película de intriga simple y corriente.