Hombre

La película desarrolla la revelación del punto de vista de su gran protagonista "Ish Kay Nay" llamado entre los blancos y durante toda la película por su otro nombre John Russell (Paul Newman). Se trata de alguien frio en apariencia, con una obstinada falta de implicación en cuestiones relevantes para los miembros de aquel mundo perdido, donde los sueños de avaricia y la moral blanca se extienden atreves de las llanuras por vías férreas.
La historia de John Russell es la historia de un antihéroe con la capacidad de considerar el bien y el mal con sus propios ojos sin hacer suyas las responsabilidades y las oportunidades que la sociedad delega. Sin dejar nunca de servir a su propia consideración de justicia. Una película maravillosa a nivel de composición visual, puede percibirse como falta de ritmo en algunos momentos tratando de recrear el marco perfecto para establecer a sus personajes y unos de los mas brillantes diálogos contra la perspectiva moral y filosofía de vida de la sociedad blanca.

Interesante western con un argumento antirracista, lo cual ya es decir que es positivo.
La exposición de los hechos no está realizada con gran vigor, sin embargo los caracteres de los personajes quedan muy bien definidos. Ello es obra de un guión esforzado a cargo de Irving Ravetch y Harriet Frank Jr, que adaptan la novela del siempre excelente Elmore Leonard.
La interpretación de todo el elenco de actores(actrices) es muy buena, con unos Fredric March y Richard Boone soberbios en sus muy diferentes roles.
La parte final emotiva.
Merece la pena aunque es cierto que la realización a cargo de Martin Ritt es algo academicista.
Soberbia fotografía a cargo de uno de los mejores de todos los tiempos: James Wong Howe.

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Ni más ni menos que Paul Newman. Aunque aquí no lo veremos como eterno galán sino como ceñudo vaquero criado como apache. A propósito, hay que ver lo mal que le queda el pelo largo como de indio. Pero tranquilas, señoras y señoritas, que a los cinco minutos lo tendréis con su peinado habitual y aseado. Pero entrando en la película, a quién no le recuerda a "La Diligencia". Pues a todos, pero "Un hombre" es mejor, sobre todo por el retrato psicológico y las ideas que maneja. Entiendo que en realidad la obra es buena por lo que propone más que por lo que vemos en la pantalla pues hay alguna carencia en cuanto a guión, ritmo y hasta en algún extraño tiroteo.

Lo bueno es que Martin Ritt construye un western psicológico, o más aún, filosófico y ético, algo bastante poco habitual, lo que hace que pueda resultar extraña por momentos. Hay muchos mensajes hilvanados mediante diálogos francamente buenos o inserta en la trama aparentemente sólo aventurera. Por ejemplo, lo absurdo de tener prejuicios negativos (los prejuicios en sí, pueden ser buenos o malo, cosa que olvidamos) por cuestiones raciales, sexuales o de cualquier tipo. O la idea de que cuando uno esquiva el mal porque cree que no tiene que ver contigo, al final te acaba afectando a ti. O la superación del individualismo mediante la empatía humana.

No es un clásico del cine del oeste pero es entretenido, con un gran elenco de grandes actores, buenos diálogos por encima de la acción, acción que yo hecho en falta para ser una peli notable. Aún así, me ha gustado y es totalmente recomendable verla, tanto si te gusta el western como si no, ya que tiene ese gusto a clásico y con un doblaje magnífico.