Cautiva

El siempre interesante director canadiense se sumerge en un tema sórdido como es el abuso de menores y las redes pedófilas, pero lo hace desde un punto de vista muy comercial, componiendo un thriller bastante poco creíble y con connotaciones morales y éticas que no se concretan. Sí se aprecia una superficial búsqueda de intriga que atrape al espectador, y si bien lo logra en muchos instantes, el guión carece de credibilidad alguna, las situaciones son insólitas y, especialmente, el final es de telefilm de domingo por la tarde, indigno de uno los los gurús del cine independiente en las últimas décadas. Se ve bien, los actores cojean, el guión es malo: cine de consumo muy normalito. Qué lejos está Egoyan de sus universos claustrofóbicos y geniales de otras películas...

La película empieza algo liosa con tantas idas hacia adelante y hacia atrás en el tiempo, pero logra hacerse interesante a medida que va pasando el metraje, para acabar de una forma algo lamentable, no se si por querer acelerar el final o por una simple falta de ideas, ese final hace desmerecer bastante al resto de la película
Las actuaciones podían ser mejores, aunque el papel que hace Kevin Durand me parece muy bueno.
En resumen, la película se queda en un proyecto de algo mejor, pero no es ni mucho menos mala

Queda más que en evidencia que "Cautivos" es uno de esos productos que llegaron a rebufo de ese gran éxito llamado "Prisioneros" (Denis Villeneuve, 2013). Mal rival ante el que ir a rebufo, las cosas como son. Por ello al final, entre similitud y similitud, "Cautivos" acaba resultando más la versión de Hacendado de "Prisioneros" que otra cosa.
A la postre podría haber sido ese el principal mal de este último trabajo de Atom Egoyan. El mal menor, que diríamos. Pero no, a "Cautivos" le aqueja un mal mayor que el resultar un burdo copia y pega barato de otra obra de mayor envergadura. El ser un copia y pega fallido.
"Cautivos" es un thriller coral alrededor de un secuestro en entorno gélido y aislado protagonizado por personajes aún más gélidos y aislados. Su inicio está bien, aunando además cierta ambición narrativa que te pone los dientes largos. Una ambición que luego se demuestra mal encauzada, provocando el principio del fin. El desenlace del producto tampoco está mal, quizás algo pasado de rosca y atropellado derivado de como se va desarrollando la película, pero aun así se deja ver. En verdad es todo lo del medio lo que te deja noqueado.
Gran parte de lo que sucede en ese arco central, además de no interesar nada, acaba hasta por carecer de justificación. Un cúmulo de irracionalidades que te cortan la digestión. El personaje que mejor resume la pérdida de rumbo que sufre "Cautivos" en toda esa parte es el malo de la función. Kevin Durand se curra físicamente un villano que acaba resultando un caricaturesco antagonista listo para enfrentarse a James Bond. También podríamos hablar de como Ryan Reynolds pierde el aura de protagonista a media función para cedérselo a Rosario Dawson, pero en fin. Atom Egoyan dispone de muchas y buenas piezas en su tablero, pero demuestra no saber utilizarlas. Por lo que en toda esa parte central la película se emborrona de lo lindo.
Podríamos hablar también del aliciente que supone ver a Ryan Reynolds antes de ser poseído por personajes tipo Deadpool. Llevo mucho tiempo deseando reencontrarme con ese perfil del actor y, justo cuando lo veo, resulta que echo de menos su faceta gamberra. Y todo porqué, pues porque Atom Egoyan lo desaprovecha como desaprovecha el resto de cosas.
En definitiva, sensación muy agridulce me ha dejado "Cautivos".

Pues eso, nada que añadir a lo dicho por los críticos: chapucera y poco creíble. No se sabe cuál es el móvil principal del secuestro y existen demasiados hilos sueltos que se resuelven de repente. La música es lo más elaborado de la película, además de la interpretación del padre. Recomendación: guardar el dinero del cine para ver otra película.

Cinta que no pasará a la historia por su originalidad. Entretenida lo justo y alimentada de innecesarios flashbacks que la hacen algo confusa. Tal vez el camino para llegar a ver una obra digna habría sido mucho más simple y directo si hubieran eliminado los citados flashbacks, que entorpecen y enquistan una trama siempre interesante pero que no termina de cuajar.

Las interpretaciones son correctas pero sus personajes no llegan a estar bien definidos. De hecho, las interacciones entre sus protagonistas se muestran tan desangeladas como necesarias para dar calor a una cinta rodeada de un paisaje adecuadamente desolador.

En definitiva, lo que podría haber sido un thriller cojonudo se convierte en una cinta pasable pero poco más, gracias, sobre todo, al empeño de su director en meter mano donde no debe.

En spoiler algunas incoherencias….