Tony Manero

El tema y la época que trata la historia que nos ocupa, podrían haber dado lugar a una película mucho mejor que la que al final ha resultado, el actor protagonista le falta mas convicción en su personaje, está como alelado,luego hay muchas lagunas en la historia, acciones de los personajes que no se explican muy bien, eso si la atmosferá gris y cutre del Chile de aquella época esta muy conseguida.Se podría haber hecho mejor francamente.

Mediocre película de Pablo Larraín que supuestamente intenta retratar la actitud negacionista de cierta clase respecto a los atropellos de la dictadura pinochetista. Y digo intenta porque claramente no lo logra. Por empezar los personajes son más planos que una tabla. Nadie sabe porque hacen lo que hacen y a nadie parece importarle explicarlo. Además, "el Tony Manero chileno" es un marginal que no pertenece a ninguna clase social y que solo obedece a sus insanos impulsos con lo cual no es reflejo de nada sino de una personalidad psicopática. Lo que si deja en claro la película es que el Tony Manero chileno es más parecido a Al Pacino que a Travolta, que en todo Santiago durante el pinochetismo no había más que dos policías ( en todas las escenas donde se supone que se debe sentir la opresión de la dictadura siempre aparecen los dos mismos policías) que, además eran ciegos o completamente idiotas incapaces de ver a alguien que se escapa delante de sus propias narices escondiéndose detrás de una puerta, cuando la policía te detenía se sentaba a la mesa a tomarse unos vinitos antes de llevarte, el Tony Manero chileno se la pasa corriendo todo el tiempo para ir a ninguna parte, el cámara era tan ciego como los policías de Pinochet a juzgar por los constantes fuera de foco de la película. Bodrio con pretensiones.

Una película que da un revés al típico cine chileno, una película que plantea a un hombre cansado de la mentalidad mediocre de nuestro país y que dentro de su locura es capaz de luchar a cualquier precio por su objetivo, dejando de lado toda limitación, con la excelente actuación de Alfredo Castro y Amparo Noguera
Inspiradora y emocionante, "Vo no vay a ser na si el otro es gringo, voy soy de acá no ma, de esta misma comuna""ya no po, ya no ma"

Otra película mas que intenta sacar algo de una época pasada, con un gran presente y un gran cambio en nuestra sociedad, deberíamos intentar no caer en el abismo de lo ya hecho una y otra vez.
Película con una actuación pasable de Alfredo castro, un guión casi inexistente, un ritmo flojo y un desenlace aun peor.
A esta película le sobra una hora, le sobra escenas de cama y tiempos innecesarios.
Los movimientos de cámara son dignos de una película de guerra y no de este drama, creo equivocado por su director

Pablo Larraín, el director de este "film" al momento de estrenar Fuga, su anterior película, mencionó que con Fuga había un antes y un después del cine Chileno, esto en realidad no paso de ser una anécdota. Claro está que por lo menos con Fuga algo de cine realizó, pero todo lo medianamente bueno del metraje anterior, con esta entrega quedo en nada.
Es el "film" más mediocre del cine Chileno, pienso que esto se debe a la idea estúpida de intentar ser catalogado como el "cineasta Chileno más original" o algo por el estilo. En Fuga, este "cineasta" ya había copiado escenas de otros films, por ejemplo la sangre que caía desde las escaleras, en una clara alusión al memorable cine de Kubrick en The Shinning, claro, se puede decir que en general las ideas se toman prestadas en ciertas ocasiones, pero este director no tuvo siquiera la delicadeza de mencionar esto, dando la impresión de querer adueñarse de esta escena memorable que todo cinéfilo o amante del cine ya conoce.
En conclusión, esperé otra entrega de este "cineasta" para criticar su trabajo, ya con esta, no tengo más remedio que calificar el trabajo de Pablo Larraín como mediocre, simplemente no tengo más apelatívos para él. Y es que un seudocineasta que se autoproclama como "el salvador del alicaído cine Chileno", por lo menos podría haber entregado un trabajo que hiciera honor a este autoapelatívo, pero nada de esto ocurrio.
Alfredo Castro es uno de los mejores actores Chilenos, lamento que haya aceptado este papel, pero un actor como él no tendrá problemas en demostrar su valía en otras producciones.
No recomendable a ningún tipo de amante del cine, si desean ver un film latinoamericano que en verdad se precie de ser tal, vean una y mil veces EL SECRETO DE SUS OJOS, film Argentino que en verdad es cine, también recomiendo EL CHACAL DE NAHUELTORO, la mejor película del cine Chileno, que por lo demás Pablo Larraín debería de ver, en una de esas aprende como se hace una película y deja de hacer este tipo de basuras.

Eduardo Alejos C.
(Cinefilms)