Al otro lado del mundo

Sin duda el John Curran este es un ladrillo. Una peli que destila hielo. Los personajes no llegan al alma, no te atrapan. En todo momento los ves desde fuera, como a través de un cristal. El ritmo decae de manera clara a mitad de metraje, el final una chuminada sin estilo ni tacto.

Una lástima. Si llega a dirigirla Ang Lee otro gallo cantaría. Peligroso guión para directores mediocres.

En fin, de las que se dice lo típico de... "la fotografía es cojonuda", "la ambientación está muy lograda" "el Norton y la Watts son unas máquinas" para ocultar sus auténticas carencias como Todo.

El Velo Pintado tiene sin duda muchos de los ingredientes de una cinta indispensable de amor.
Lo primero, una ambientación muy lograda, que nos traslada a esa remota región de la China de los años 20 en medio de una letal epidemia de cólera. Allí, somos testigos del esfuerzo que Walter Fane, un joven y prometedor médico, y su esposa Kitty realizan para luchar contra la enfermedad.
Todo esto contando con un guión sólido y con otra gran interpretación de Edward Norton, que vuelve a demostrarnos que se trata de uno de los mejores actores de su generación; junto a Naomi Watts, que cumple notablemente con su papel.
Y sin olvidar una maravillosa banda sonora, completamente acorde con la película, y que nos ayuda a sumergirnos aún más en esta bella historia de amor.

Desde luego se deja ver y para un género tan decaído como este, es una propuesta decente pero “El velo pintado” no deja de ser una película que, quizá, se ha sobrevalorado bastante habiendo tenido que leer comentarios como que es el mejor drama romántico en mucho tiempo.

Y tiene varias virtudes como que la banda sonora es muy buena, así como el resto de apartados técnicos como la fotografía entre otras que son bastantes buenos. Las interpretaciones de Edward Norton y Naomi Watts son buenas pero tampoco sobresalientes. Ella solo tiene que mostrarse aburrida y llorar de vez en cuando y él serio toda la película. Pero no puedo decir lo mismo de los secundarios muy especialmente de un más que mediocre Liev Schreiber.

La dirección de John Curran tampoco es demasiado destacable. Todo es demasiado frío y demasiado poco creíble con mención especial de una última escena que resulta una conclusión más que nefasta para una película hasta entonces pasable.

Aún así se le puede echar un vistazo y nos encontramos con dos horas agradables aunque desde luego hay películas en su género bastantes mejores que esta.

Aunque me pareció algo lenta, le sobran algunos minutos desde mi punto de vista, la historia es interesante. La fotografia, como ya se ha dicho, es espectacular. Los dos protagonistas estan soberbios.

De todas formas, reconozco que este tipo de dramas son mi debilidad.......

Floja revisión del libro del mismo título de W. Somerset Maugham.

Como siempre los guionistas cambian la historia (el que quiera saber qué cambia que se lea el libro). No sé que manía hay con cambiar las historias originales de los libros, si vas a adaptar un libro pues hazlo contando la historia tal y como la concibió el escritor. Por supuesto también faltan personajes, situaciones, etc... ¡Ah, vale que es una adaptación!, ignorante de mí. Entonces entre película y libro, me quedo con la historia del libro.

Buenas interpretaciones de Norton y Watts, pero sus esfuerzos no salvan que la película sea una postal relamida de la China de los años 30.

Gustará a romanticones o romanticonas que les gusten las películas "de época" con buena fotografía, buen vestuario y que no se hayan leído el libro de Somerset Maugham. O que no sepan ni siquiera quién es.